Los daños colaterales al Sevilla ante los anhelos de Mbappé y el Real Madrid
La Bota de Oro de la 2024/25 y el récord de Cristiano Ronaldo, con el Sevilla de por medio
Monumental rajada de Almeyda contra el arbitraje de Muñiz Ruiz: "No soy un payaso de circo"
Aunque el espíritu navideño invade ya al sevillismo en estas fechas, los rescoldos del arbitraje de Muñiz Ruiz en el Santiago Bernabéu el pasado domingo no se olvidan. El Sevilla FC volvió a ser víctima de una dirección deportiva parcial, sesgada y decantadas hacia el Real Madrid, justo en el día en el que Kylian Mbappé se jugaba pulverizar uno de esos récords efímeros como es el de mayor goleador en un año natural. Al fútbol de clubes se juega de agosto a mayo. Gaseosa.
Este domingo, el colegiado gallego puso todo lo que pudo de su parte para que el delantero francés, la gran estrella del club merengue y de LALIGA EA SPORTS, mano a mano con Lamine Yamal, consiguiera lo que había ido a buscar al Santiago Bernabéu. Superar, o al menos igualar, a Cristiano Ronaldo en la marca de 59 goles en 2025. El francés estuvo fallón en las ocasiones que tuvo, raro en un jugador superlativo como él, que no encontró la manera de batir a Odysseas Vlachodimos con la pelota en juego. Lo hizo por fin desde el punto de penalti, tras un claro derribo de Juanlu a Rodrygo poco después de que el canterano sevillista también fuera trabado en el área contraria.
Después, Muñiz Ruiz señaló otros dos penaltis que, de no haber mediado el VAR, habrían puesto a Mbappé en disposición de alcanzar los 60 tantos y haber pulverizado el récord de Cristiano Ronaldo, al que homenajeó en su celebración. Las dos decisiones del gallego fueron dignas de circo, porque no había penalti por ningún lado y tuvieron que ser anuladas. Entroncaban con una línea de arbitraje desde que comenzó el partido, con la balanza totalmente decantada hacia el lado local. El CTA, por cierto, no ha visto que ninguna de las jugadas polémicas del Santiago Bernabéu sea digna de entrar en el programa ‘Tiempo de Revisión’.
Mbappé, la jornada 37 y la Bota de Oro
Kylian Mbappé sólo lleva un año y medio en el fútbol español tras numerosos intentos de Florentino Pérez por ficharle. En ese tiempo, se ha medido en tres ocasiones contra el Sevilla, y ha marcado en las tres.
Curioso es el paralelismo de la vez anterior en la que el Sevilla y el Real Madrid se enfrentaron. Fue en el Sánchez-Pizjuán, en la jornada 37 de la pasada temporada. Los dos equipos no tenían ya nada que hacer clasificatoriamente, y solo estaba ‘en juego’ la posibilidad de que el parisino consiguiera la Bota de Oro, algo que logró superando a Salah y a Gyokeres.
Busquets Ferrer fue el que perpetró el arbitraje que allanó el camino a Mbappé hacia lo único tangible que ha podido celebrar desde que es madridista. En el minuto 12 fue demasiado riguroso en la expulsión de Badé, en una jugada que difícilmente podría haberse considerado como ocasión manifiesta de gol, ya que la pelota se dirigía hacia la esquina y probablemente Mbappé no la hubiera alcanzado. Además, el contacto entre franceses, si es que existió, fue mínimo como para caer derribado.
Al inicio de la segunda mitad, el expulsado fue Isaac Romero por una falta muy dura sobre Tchouameni en el centro del campo. Lo curioso, es que el juego se reanudó, pero Busquets Ferrer contravino el protocolo VAR para pararlo, volver atrás, y expulsar al lebrijano. Mbappé acabó marcando el 0-2 definitivo, allanando su camino hacia la Bota de Oro, y el Sevilla sufriendo los daños colaterales de los éxitos del francés.
