Lágrimas para empañar una final de Copa que San Mamés sí se mereció

Valverde, en Pamplona: "Es un mal resultado, lo lógico era un cero-cero"
Uno por uno del Athletic en El Sadar: derrota mínima en el regreso de Iñigo Martínez
San Mamés está hecho como caja de resonancia, que diría Marcelo Bielsa, para estas noches, aunque la cosa empiece con retraso por un lío con el bus visitante, siga con cambio de campo 2 veces en el sorteo y acabe mal... La ida de la semifinal de Copa de El Sadar dejó haciendo cábalas al Athletic Club, que sabía que guardaba la baza del fuego de la Catedral. Con un récord de asistencia de 51.544 espectadores, la grada ha enchufado al equipo de Ernesto Valverde en su misión de remontar el 1-0 de la ida... pero el sueño de 'Txopo' iribar se le fugó en el último momento. El Athletic buscaba su tercera final de Copa en los cuatro últimos cursos, la sexta en 14 años y la cuadragésima en toda su historia. También la undécima final en diferentes competiciones en la última década y media... para que luego haya agoreros que digan que la muchachada son unos pasotas y que sólo quieren ir a Ibiza. Pero el 6 de mayo habrá que hacer hueco a los navarros tras imponerse en la prórroga con un gran gol de Pablo Ibáñez, después de acabar también con 1-0 el tiempo reglamentario, siendo el Athletic el único equipo que ha buscado siempre y en cada periodo de esta eterna noche la victoria. No hubo justicia, pero fútbol es fútbol, que decía Bujadin Boskov.

Valverde recuperó el Rock and Roll juntando a Oihan Sancet e Iker Muniain en una primera parte con un ambiente brutal y el portero navarro perdiendo tiempo desde el minuto 1. Guruzeta casi les vacuna pronto, pero se lió en una clara llegada ante Sergio Herrera y los navarros usaron desde ahí su buen pie para enfriar el choque porque había mucha electricidad. En la línea de los últimos partidos de liga en el Athletic se fallaban pases y se quedaban centros sin rematar pese a las ganas que se ponían. Pero por fin la estrategia funcionó. Vesga peinó un córner e Iñaki Williams rompió su mala racha con el gol en el 32'. La eliminatoria estaba igualada, hubo otra de De Marcos y un gol correctamente anulado a Iñaki, aunque Kike García dio un buen susto antes del descanso.

A la vuelta el ritmo se frenó en San Mamés...
Con las tablas ambos se tentaron la ropa. El Athletic arrancó primero con varias llegadas sin cerrar, una lluvia de córneres y los remates desviados de Yeray e Iñigo Martínez. En el 69' ya fue al cuello: Nico pudo matar la semifinal, en un gran pase de su hermano, pero la echó arriba y en el 72' Herrera le sacó otra a Iñigo a bocajarro. En el 85' hubo otro doble perdón, Herrera paraba primero el remate de Raúl García y luego Nico la volvió a echar horriblemente a las nubes. Así que Osasuna firmaba la buscada prórroga y la tanda tras una rácana 2ª mitad en la que ni se asomó por el área de Agirrezabala. Media hora de más que empezó con un gran cabezazo de Vesga en otro córner (el 15) y que no pudo sino desequilibrar la balanza con un golazo en el 115' de Pablo Ibáñez tras 2 pifias seguidas de Zarraga. Qué mazazo, el que perdona lo paga y pierde.
