Marvel Cosmic Invasion, pura recreativa noventera como placer culpable

La enésima conexión con el entramado marvelita en los videojuegos choca con el pixel para dar con un viaje a las máquinas recreativa de hace unas cuantas décadas. Marvel Cosmic Invasion es la reinterpretación de un juego de otra etapa con todas las ventajas e inconvenientes que van en esa maleta, y con un puñado de horas de puro entretenimiento.

El chaval que hace 25-30 años perdía las horas en el bar de su padre aporreando los botones sonríe otra vez. No sólo por la nostalgia sino por rememorar esa sensación de que el beat 'em up mantiene ese poder en mí para buscar horas donde no existen para repetir la misma fórmula. Y funciona, con asteriscos, pero lo hace.

La primera reacción rápida, yo diría que errónea, es asemejarlo a Absolum (por estar bajo la sombra de Dotemu) pero no hay nada que comparar. La puerta de entrada para cada uno de ellos es un portal hacia diferentes dimensiones, una es una maravillosa reinvención del género y la otra es un viaje a los 90.

Absolum es una reinvención del género maravillosa y Marvel Cosmic Invasion es lo mismo de siempre con el sello de Marvel. Es un juego de buen nivel, de una compañía que está haciendo títulos muy vistosos en el género y la respuesta final es un disfrute completo repleto de aclaraciones para este entretenido Marvel Cosmic Invasion.

Esa es la mejor baza para llegar al juego y entrar en el barro. Si bien desde el punto de vista del solitario quizás me pese un poco más, es un juego que funciona bastante bien en todos los sentidos. No hay algo que brille especialmente, no es que me enamore la banda sonora, no es que lo ponga por encima de muchos otros juegos del género, pero todo lo que da, lo hace bien.

El mejor valor de Marvel Cosmic Invasion: el cooperativo

El peso de Marvel Cosmic Invasion tras completar las cerca de 20 horas de experiencia me deja una sensación clara: el cooperativo y la inmersión son lo mejor del juego. Esa partida distendida con colegas donde apetece charlar de la vida sin pensar en nada más que pulsar de vez en cuando el 'R1' para hacer un ataque poderoso. Ahí es donde más brilla el juego de Tribute Games.

Es la misma esencia del también pixelado juego de las Tortugas Ninja enfrascado en el género, un espacio desenfadado donde avanzar. Y si es dentro de un universo conjunto donde la primera partida con Venom te sorprende con dos o tres detalles, esa complicidad ayuda a entrar de lleno en algo especial, ya sea con el peque de la casa, con un colega de toda la vida o con otro fan de Marvel.

El mejor valor de Marvel Cosmic Invasion es el tratamiento a los personajes en su aspecto jugable. Aunque no hay un desarrollo excesivo de ellos en la trama (ni de los villanos ni de la historia), sí están muy bien diseñados. Ataques limitados pero muy bien encuadrados en el estilo de combate de cada uno.

No es sólo saber a quién incluir la mecánica del parry, del vuelo o de la esquiva, sino el pack completo. El control de cada personaje es lo mejor del juego ampliado a la jugabilidad pura. A mí personalmente me parecía un poco tosca Hulka y, conforme más la jugaba, más divertido me pareció el personaje, sobre todo en los movimientos.

Hay animaciones y movimientos de los personajes que están muy bien logrados porque, aunque Hulka parece torpe y lenta (y lo es, no es tan rápida como Spider-Man o Rocket), eso se nota al controlar el personaje. Pero los combos que tiene, el daño que hace o el gancho al enemigo es muy satisfactorio, y eso tiene mucho valor a la hora de recrear los personajes de Marvel si están en el punto álgido de lo que es el diseño del videojuego.

El diseño de niveles y el muro de los jefes

El gran pero subyace bajo determinados diseños de niveles que me dejan un poco indiferente, sobre todo cuando de los cuatro, cinco o seis primeros jefes (no recuerdo ahora), hay varios muy parecidos en mecánicas. A veces es repetitivo y sin muchas variantes. Y pesa porque es relativamente breve dentro de que es un título muy rejugable, pero te deja con una sensación algo más pesada quizás en el análisis.

Al entrar de lleno en algo tan sesudo como un análisis Marvel Cosmic Invasion cae algo más frente a su verdadero brillo: la esencia pura de esa recreativa, la jugabilidad sin pensar, el vicio. Pero luego falta profundidad, y no hablo sólo del planteamiento del modo historia o de los detalles como la ausencia de nombres en el sencillo avance de la trama, es como que hay algunos vacíos.

20 horas que pueden ser 40

Y lo que sí se me hace muy entretenido es el reto de los objetivos, porque le da un plus a la rejugabilidad, sobre todo en el Modo Difícil. Una vez comprendes a los personajes tras la primera partida, es fácil ir más allá para exprimir todo el potencial de cada uno si de verdad conectas con el juego. Porque el juego promete 20 horas pero en el cooperativo es fácil duplicarlas.

Lo más lógico es apostar de inicio por el Modo Historia y dejar el Modo Arcade para más adelante, porque es un reto de muchas horas donde ese "continuar" está hecho, yo creo, para cuatro jugadores. Y lo ideal es descubrir esa experiencia más de máquina recreativa después de haber subido el personaje al nivel 10 o después de haber pasado el Modo Historia, porque a poco que echas una partida, sube muy rápido el nivel del personaje y consigues muy rápido todas las recompensas que te pide el juego.

Conclusiones de Marvel Cosmic Invasion

Marvel Cosmic Invasion es muy fácil de jugar, es accesible, perfecto para compartir con alguien más en casa y con un manejo de personajes excelente. Es un título muy funcional por lo que evoca, perfecto para newbies en el género y con muchas horas de rejugabilidad. Es un reflejo puro de esas recreativas con todo lo que conlleva, y el apellido Marvel le sienta muy bien.

*Jugado en PlayStation 5

Lo mejor:

• La recreación del género al más puro estilo noventero.
• La accesibilidad de cada superhéroe.
• Los poderes de cada superhéroe, muy bien trasladados al gameplay.
• La rejugabilidad planteada desde los objetivos de cada fase.

Lo peor:

• La sencillez de algunos bosses y la repetición de ciertas mecánicas entre ellos.
• El escaso trabajo en la trama y en detalles como la ausencia de nombres en los diálogos.

80/100