Review: The Walking Dead 5x13 'Olvida'
The Walking Dead continúa su integración en Alexandría con un episodio de los llamados de transición en la búsqueda de un cliffhanger potente a falta de sólo tres episodios para acabar su temporada y 'Olvida' no es más que un inteligente señuelo para ir posicionando a los nuevos personajes en el la comunidad y ver cómo el grupo de Rick es capaz de asimilar su nueva situación.
En esa posiciónel personaje que ofrece algo de conflicto en este capítulo es Carol, que junto a Rick y Daryl toman la decisión de salir más allá de los límites cada cierto tiempo para reunirse. Obviamente no se fían de todo lo que tiene que ver con Alexandría y en el inicio vemos cómo dan un paso para asegurar su estancia en el nuevo refugio.
Entre los tres toman la decisión de robar armas para esta preparados por lo que pueda llegar y en palabras de Rick: "Si tenemos que hacerlo es ahora que es cuando no estarán preocupados de que tengamos encuentros como estos, pero lo tenemos que intentar (asentarnos)".Justo tras esa frase aparece una incógnita en forma de zombie que nos deja pensativos, el caminante al que asesinan tiene marcada en la frente una "W" cuyos posibles significados hemos analizado en este artículo.
La concentración de personajes en una misma locación hace que sea imprescindible la división de historias, por lo que de nuevo algunos quedan relegados para próximos episodios ante el protagonismo secundario en este caso de Sasha, Maggie o Carol (no hace falta decir que Rick y Daryl son y serán siempre los protagonistas de la ficción). La activación del nuevo grupo en Alexandría sigue siendo la parte principal del episodio, por lo que vemos a una Deanna todavía destinando trabajos a Maggie, que será su segunda a cargo para hacer entrevistas o Sasha, que tras exigir ser la tiradora de la torre, consigue ese puesto junto a Spencer el hijo de la líder.
Esa misma normalidad la vemos disfrazada en Carol, punto de fuerza del episodio, ya que le vemos las dos caras, la formal ante los nuevos vecinos y la desconfiada tras ellos, el mismo cambio que vemos pero a la inversa en Daryl, que en su fanatismo por mantenerse lejos de Alexandría comparte el episodio con Aaron más allá del portón principal.
Sin duda la evolución de Daryl es la más importante en el decimotercero de The Walking Dead, por lo imprevisible respecto al cómic y porque nunca lo hemos visto en funciones comunes con un grupo ajeno. Es por eso que en su huida personal, el exterior y la búsqueda conjunta con Aaron de un caballo se convierte en el objetivo de ambos.
Entretanto Alexandría disfruta de la fiesta de bienvenida a todos los nuevos vecinos, una cita en la que conocemos definitivamente a todos los personajes del refugio: Tobin, Olivia, Gracht (esposo de Deanna) y a la familia de Jessie, a su hijo y sobre todo a Pete, su esposo.
Un beso en dos episodios
La banda sonora, la presentación del personaje en el episodio anterior y la descarada atracción entre Jessie y Rick lo único que nos hace es creer en un futuro enfrentamiento del policía con Pete, seguro uno de los puntos de explosión en Alexandría. Y en esa situación ambos se quedan sólos, hay un tímido beso en la mejilla y una conversación en la que Jessie da un paso adelante:
Jessie: "Una vida ordinaria como antes, bueno no como antes. Hemos perdido muchas cosas, pero al menos tenemos algo de de vuelta".
Justo después, su hijo estampa una enorme "A" en la mano de Rick seguido de un "oficialmente eres uno de nosotros", completando un círculo en una inclusión familiar que el propio policía nota y que le hace ir más allá, vemos sus intenciones sin conocerlas e imaginamos que todo ello es el inicio de una explosión.
De reclutado a reclutar
La conclusión del episodio tiene dos vertientes y finalizan en el mismo camino. Ambas mantienen una inclusión en el grupo de dos maneras muy diversas, Rick ya vemos que se siente parte del grupo por la atracción que siente hacia Jessie, mientras que el inadaptado Daryl conecta de manera inesperada con Aaron. Después de la búsqueda frustrada del caballo (apoteosis zombie), Daryl conoce que su nuevo compañero le había pedido a Deanna que no le diera un trabajo porque él tenía uno para él, reclutar a nuevos compañeros.
Aaron: "Tú sabes definir quién es buena y mala persona y yo no quiero arriesgar mi vida, eres bueno fuera".
En esa evolución el episodio en el que Rick y Daryl pedían controlar todos los pasos de Alexandría robando armas, ambos prefieren enmudecer en la última reunión con Carol, que tras robar las armas y tener una dura escena con el hijo de Jessie, es la única que se mantiene en vilo con todo lo procedente de su nuevo hogar.
Y qué mejor final que Rick 'disfrutando' de un paseo cercando la valla del refugio, en una profunda reflexión sobre lo que significa en este mismo instante Alexandría, un punto de inflexión con los Bee Gees y su "Spicks and Specks" que va de la sonrisa del protagonista a los oídos de todos los espectadores.
