Polémica en el Huesca - Sporting con falta sobre Christian Joel en el gol de Jorge Pulido

gntjc8twmaa4oaijpg_001.jpg
Falta sobre Christian Joel en el gol de Jorge Pulido (Captura: Archivo VAR)
Compartir

GijónEl partido entre Sporting de Gijón y SD Huesca no estuvo exento de polémica arbitral. Y es que, cuando el marcador estaba igualado, al final del descuento de la primera mitad, el cuadro altoaragonés ejecutó un saque de esquina en el que Jorge Pulido remató un balón en el segundo palo y marcó el 2-1 provisional. Una acción en la que prácticamente no hubo revisión por parte del VAR y en la que se dio por válido el tanto. Algo que provocó las quejas y el enfado del sportinguismo y añadió más leña al fuego en el ciclón imparable que vivimos respecto al arbitraje. Lo cierto es que, en el momento que el balón estaba en juego y se dirigía al área sportinguista, hay un jugador, el número '8', que encima a Christian Joel. Se trata del jugador azulgrana Javi Pérez. Este entorpeció al portero rojiblanco saltar con comodidad para intentar atrapar el balón. Sin embargo, el VAR sufrió otro 'apagón' y no se consideró punible. Los expertos indican que esa acción debió acabar con una falta en ataque y balón a favor del Real Sporting.  

PUEDE INTERESARTE

Una jugada polémica muy parecida en el Ferrol - Dépor sí se pitó

 El árbitro del Huesca - Sporting señala penalti con polémica.

Asimismo, algunos aficionados sportinguistas e incluso la retransmisión televisiva del Huesca - Sporting recordó una acción similar del Racing de Ferrol - Deportivo de La Coruña que sí fue señalada como falta en ataque. La jugada es sumamente parecida, pero la resolución, completamente opuesta.  

PUEDE INTERESARTE

Para más inri, la polémica arbitral no acabó ahí. Y es que, al inicio de la segunda parte, Joaquín Muñoz derribó a Jonathan Dubasin dentro del área del Huesca. Una acción que, en principio, no iba a ser castigada. Sin embargo, tras momentos de revisión, el árbitro del partido, Manuel Jesús Orellana Cid (del Comité Andaluz) acudió a las pantallas a revisar la acción. Tras verla repetida en movimiento y en parado, decretó la pena máxima. Un momento en el que Guille Rosas aprovechó para recordarle al colegiado que el delantero azulgrana ya estaba amonestado. Por tanto, esa acción debería ser su segunda cartulina amarilla y consiguiente expulsión. No obstante, este no lo interpretó así y dejó que el atacante del Huesca continuara sobre el terreno de juego. Queda claro que el nivel de arbitraje se pone en entredicho cada jornada. Y no solo eso, sino también la enorme disparidad de criterios. Cada semana se penaliza una jugada que la anterior no, y viceversa. Lo único que pone de acuerdo a todos y cada uno de los clubes es el cabreo de todas las semanas con el estamento arbitral.