Un desplazamiento histórico que Kanouté elevó al cielo de Madrid

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El reloj no se detiene pero en Sevilla no se olvida. El 23 de junio de 2007, hace ahora 15 años, el conjunto hispalense consiguió su cuarta Copa del Rey (la penúltima) en el Santiago Bernabéu, ante el Getafe, acompañado de una oleada nervionense que pasó a la historia. Eran otros tiempos. El Sevilla FC de Juande Ramos rozaba su máximo nivel y los hispalenses, allá donde llegaban, arrollaban. La afición lo sabía y la Copa del Rey de 2007 debía ser otro título más para no olvidar. No brillaba tanto como la Europa League, pero el Sevilla llevaba sin levantar un título de Copa del Rey desde antes de los 50 y la grada bien lo sabía. Según las autoridades, hasta 85.000 sevillistas se desplazaron hasta Madrid para vivir aquel hecho histórico y Kanouté puso el broche de oro.

El inicio fue vibrante. Alrededor de 50.000 sevillistas animaban desde la grada, pero el primer golpe lo pegó Güiza. Tras un grosero error en la zaga, el internacional se plantó ante Palop... y el portero obró el milagro. La respuesta fue definitiva. Kanouté, que recogió el balón en el medio, corrió hasta el área contraria y consiguió poner el 1-0, que sería definitivo. La segunda parte se llenó de tensión, de ocasiones del Getafe y de un excelente ejercicio de supervivencia por parte de los pupilos de Juande Ramos. Kanouté se fue hasta expulsado, Martí tapaba huecos de forma inexplicable y la grada explotó al pitar el final. Se cumplen 15 años de la cuarta Copa del Rey de la historia del Sevilla. Después llegó otra, pero este título sigue siendo uno de los grandes atractivos cada principio de temporada en Nervión.

 Alineaciones de la final de Copa del Rey.