Logo de Fútbol
Fútbol

Triple castigo para el Sevilla

Vicandi Garrido expulsa a Pareja al minuto del partido.
  • Así vivimos el Espanyol-Sevilla

Compartir

Partido torcido, tarde torcida para el Sevilla en Barcelona. Una jugada, una acción al principio del partido, determinó el resto. Un minuto de igualdad, más de 90 de inferioridad y cuesta arriba. A pesar de la fe del equipo nervionense, a pesar de la respuesta digna, las limitaciones pudieron con el equipo de Sampaoli, que después de cinco victorias consecutivas tropezó de aquella manera en el estadio periquito. Vicandi Garrido consideró penalti de Pareja en esa jugada decisiva. Pero además, y quizás fue lo que mató al Sevilla, expulsó a Pareja. Un par de decisiones muy rigurosas y que, al menos la segunda, se alejan del espíritu de la norma en este tipo de acciones. El caso es que dice el nuevo reglamento que se debe evitar el triple castigo para un equipo, aquello de 'penalti, expulsión y gol'. El Sevilla lo recibió, ese y otro triple castigo, el de la derrota, el del fin de la racha y de la pérdida de la segunda plaza en favor del Barcelona. Todo lo que hubiera preparado el Sevilla para intentar sacar adelante este partido se fue por el garete al minuto del partido. Parecía mentira que en tan poco tiempo todo se pudiera poner tan en contra. Apenas en la primera jugada del partido, Piatti aprovechó el fuera de juego mal tirado por la defensa del Sevilla para sacar unos metros en carrera que fueron mortales. Mortales para el partido y mortales Pareja. La polémica estaba servida, porque el defensa argentino tocó a su compatriota, pero ¿lo suficiente como para derribarlo? Pues parecía que no. Pero aún hubo más castigo para el Sevilla además del penalti, pues Vicandi Garrido expulsó a Pareja por esta acción. Una expulsión que queda sujeta a la interpretación del árbitro, pero que sí la norma se inclina por la reforma de la regla del 'triple castigo', expulsión, penalti y gol, parece que la decisión de Vicandi no respeta demasiado esa norma. Y sí, el Sevilla recibió el triple castigo del penalti en contra, de la expulsión y del gol... y corría en el marcador corría el minuto 3 de partido. La norma dice que se debe evitar el excesivo para un equipo, evitar el triple castigo de la expulsión, el penalti y el gol; Vicandi Garrido, si ya el penalti era dudoso, aumentó la controversia con la rojaTan poco había pasado, tanto había pasado, que quedaba todo el partido por delante. Sampaoli reaccionó haciendo un cambio, incluyendo a Lenglet por Ben Yedder. A la larga el francés dio salida aseada de balón, pero evidenció grandes errores en las marcas que caro costarían. Una deficiencia que ha de corregir urgentemente. Pero lo cierto es que el Sevilla, como gran competidor que se siente y es, dio respuesta a ese gol de manera inmejorable. Entraron en acción poco a poco Nasri, N'Zonzi, Vázquez, Sarabia, Jovetic... las armas ofensivas del conjunto sevillista. Y la calidad con la que combinaron, el acierto y la confianza con la que ejecutaron su nuevo plan, disipó aparentemente los efectos de la expulsión de Pareja. Si alguien vio el partido desde el minuto 3, nadie habría advertido que estaba en inferioridad.  El Sevilla jugó mejor en el desarrollo del encuentro, de esa primera parte. Cuando jugaba en campo contrario, creaba peligro, cuando la pelota circulaba en campo propio, lo sufría, aunque el Espanyol apenas pudo replicar el monopolio de la pelota del Sevilla. Los protagonistas del partido, esos que iban de rojo y tenían la pelota, trenzaron cerca del área varias jugadas, una de ellas impecable, que acabó con el empate de Jovetic tras dos grandes detalles de Vázquez y Nasri hechos gol por el montenegrino.

Se había crecido el Sevilla, tanto que empató con uno menos. Y llevó el partido donde quería, incluso de nuevo Jovetic pudo marcar. Pero el Espanyol se repuso a través de su superioridad, y en los últimos minutos de la primera parte acorraló al conjunto sevillista con saques de esquina, faltas, y jugadas a balón parado. Reyes, que marcó el primero de penalti, volvió a castigar a su equipo con una asistencia en una falta que Marc remató de cabeza. Era el minuto 46.En la primera parte el Sevilla reaccionó bien a la expulsión y al 1-0, incluso empató, pero en la segunda no tuvo ya capacidad de reacción ni posibilidad de réplicaEl campo era largo con uno menos, el partido era largo con uno menos, pero el Sevilla lo seguía intentando. Con el paso de los minutos el cansancio y la inferioridad empezaban a tener más y más presencia. Al principio en las pérdidas. A los sevillistas ya les costaba más recuperar posiciones, tapar los huecos, pero aún así con el balón todavía era capaz de inquietar, y alguna escaramuza tuvo en ataque, aunque sin inquietar demasiado a Diego López. Intentó rejuvenecer el ánimo del Sevilla y sus fuerzas Sampaoli con un par de cambios, dando entrada a Vietto, de nuevo intrascendente, e Iborra, ya para buscar opciones en el juego aéreo. Pero cuando el Sevilla se disponía a encarar la fase más decisiva del partido un gol abajo, llegó el mazazo con el tercer gol perico, que justo antes perdonó pero que en cuanto apareció Gerard Moreno materializó su oportunidad.  El 3-1 ya fue definitivo, porque el Sevilla entonces perdió confianza en sus posibilidades, y realmente el marcador, tanto por el resultado como por el cronómetro, daba poco margen. No perdió la dignidad el equipo de Sampaoli, pero sí la seguridad en sí mismo e incluso la confianza en la remontada, que realmente ya era imposible.  Se le fue el partido al Sevilla en Barcelona, más bien se le fue la oportunidad de competir al Sevilla.     Todos los resultados en resultados.eldesmarque.com