El Molinón refrenda la escalada europea del Athletic

Asís Martín 06 MAR 2016 - 19:58h.

La ocasión la pintaban calva, calva, pero calva... Las derrotas de Villarreal, Celta, Eibar y el empate del Sevilla abrían el apetito al más pintado viendo que el Athletic Club visitaba este domingo a su víctima favorita, el Sporting de Gijón en el Molinón. Y ha salido de cine, como suele pasar en ese mágico campo, pese a que la 'liada' de Abelardo ha condicionado por completo el arbitraje. Tras haber goleado al Valencia en Mestalla y al Dépor en San Mamés los leones han vencido (0-2) en el 'santuario' zurigorri de Asturias donde han estado acompañados por cerca de 2000 fieles, terminando con 10 por la injusta expulsión de Aymeric Laporte con dos tarjetas de chiste ante el 'piscinero' Halilovic. Hay que recurrirlas, sí o sí, mientras que Balenziaga será baja ante el Betis con una quinta amarilla muy buscada. Lo importante son los tres puntos, obtenidos por obra y gracia de Beñat, de falta directa, y de Óscar De Marcos, con un obús antológico desde la frontal, que permiten acceder a la sexta plaza poniéndose tan solo a uno del Sevilla y a 8 del submarino de Marcelino. Parece que por fin se deja de hacer el canelo cuando la suerte viene a la mano, y hoy pese a que el trencilla se ha comido un penalti con expulsión añadida escandaloso sobre Aduriz o han expulsado mal al de Agen, se ha hecho lo necesario: ganar a contrarios asequibles para ganar en puestos y en confianza. Habrá que ratificar este buen momento en la Catedral ante los chés, en la ida de UEFA, donde habrá que ver como llega Aduriz, que hoy se ha ido con molestias lumbares tras un fuerte choque con el portero Cuéllar. Ir a por todas y con todoEl esta misma semana renovado Ernesto Valverde, 4 días después de batir a los gallegos no quiso hacer rotaciones y tiró de su teórico equipo de gala, al que solo le faltaba el lesionado Iñaki Williams. El resto eran los 'gallos' para hacer frente a un rival dirigido circunstancialmente por un bilbaíno, Iñaki Tejada, que suplía al sancionado 'Pitu' Abelardo. Su rajada pública no pareció tener efectos positivos, -hasta les pitaron tras el saque inicial un fuera de juego que no era-, sino todo lo contrario. Allí todos parecían estar más pendientes de Del Cerro Grande que del juego.Pasado el griterío los vizcaínos le pusieron pausa al tema, tratando (con dificultad) de jugar por dentro, de poner criterio ante un rival nervioso y con pinta de poder ser derribado con un soplido. El primero en intentarlo fue Raúl García, con un gran disparo que exigía una buena estirada de Cuéllar, le siguió Muniain, creciendo día a día, que puso otro balón interesante e incluso tuvo una llegada que remató fatal. Superioridad sin oposiciónBuenos síntomas, porque el Sporting apenas oponía casta, vamos que se diría que de fútbol anda peor que de pasta, que ya es. Sanabria erraba la única clara que tuvieron. Y ya que no entraban en jugada Beñat se encargó de abrir la cuenta en el 27' con un gol de falta directa, su tercer tanto en esta temporada de libre directo, aunque esta vez tuvo colaboración del guardameta local. Dada la 'patada en la puerta' era menester ir a fondo que diría Jack el Destripador. En el 36', pese a que el Athletic se lo tomaba con calma, se vivió un penalti de escándalo sobre Aritz Aduriz, acción que hubiera supuesto la expulsión de Vranjes, y que vino a dar a entender que sí vale del algo montar el pollo al colectivo arbitral. También hay quien dice que 'eso' que le hicieron al donostiarra solo se aprecia bien por TV, en fin... Que el partido siguió y Aritz casi se fabrica el segundo con una orfebrería de bricolaje que se fue cerca del palo derecho del 'Pichu'. No entró con lo que al descanso se llegaba con 0-1. Corto visto el eclipse de un Sporting desaparecido. De Marcos impide la reacción Quiso regresar a la vida volviendo a salir fuerte en el segundo periodo, pero ni Mascarel creaba ni Halilovic ni Ndi podían brujulear entre líneas. Salvo cuando el colegiado madrileño, cada vez menos entero, les echaba un capote como con la inexistente primera amarilla a un Laporte que estaba haciendo un partido excepcional y ya pasó a estar condicionado.Día triste para el arbitraje y para el fútbol visto el rendimiento de la 'rajada' de AbelardoEn ese impass había la duda de si podía pasar factura la inercia del choque cuando De Marcos le echó el cierre con un gol antológico. Un obús desde la forntal en el 59' que entró como un flechazo de Robin Hood y será uno de los tantos de la jornada. Hoy rompió el partido, con lo que llegaron tres cambios de golpe: Menéndez, Castro y Sabin Merino. El de Urduliz estuvo en un tris de marcar según salía y no digamos Aduriz que dolorido de la espalda falló el rechace solo y a un metro de la portería. Del Cerro termina de rajarseSe ve que había ganas de revitalizar el tema, porque la increíble expulsión de Laporte, con dos amarillas de auténtico regalo a la grada, dejaron al Athletic con 10 el último cuarto de hora, supliendo a la carrera Gurpegui a Susaeta. Un escándalo, y eso que no somos partidarios de forofadas. Es lo que ocurrió, sin aditivos. Pero el equipo está muy entero, bastante más que hace apenas dos semanas, y se pudo concluir el tiempo sin mayores averías. Logrando sumar 9 puntos consecutivos a la par que se mantiene el idilio con Gijón: ya son 26 años sin conocer la derrota allí, y 11 visitas seguidas puntuando. Ahora regresa la competición europeaEl Athletic, intratable en liga, recibe este jueves en San Mamés al Valencia CF (21:05) en el choque de ida de los octavos de la UEFA Europa League, rival al que tiene la moral comida tras el 0-3 de Mestalla. Pero fútbol es fútbol, esta es otra competición y habrá que partir de cero. El remate de la semana será también en La Catedral, con la llegada el domingo (18:15) de un pujante Betis de la mano de Merino.

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