El peso de Aritz Aduriz

El peso de un gran futbolista se ve tanto cuando está como cuando no. Parece mentira lo que puede cambiar un equipo con un jugador y sin él. Es el caso del Athletic Club con Aritz Aduriz. En el primer tiempo de este sábado en Balaídos los leones han sido una apisonadora que ha podido derruír al RC Celta. El 0-2 al descanso parecía liviano. Aritz y Williams parecían Batman y Robin. Sin embargo fue irse lesionado el donostiarra, marca los vigueses y pasarlas canutas. Dos equipos en un mismo partido. Menos mal que al final se sumó, sufriendo, la cuarta victoria consecutiva y esos 36 puntos tan valorados. Es tal la exhuberancia actual del equipo de Ernesto Valverde que incluso con bajas y cambios te pasa por encima. Lástima que el donostiarra se haya ido con problemas musculares... Anotó el 0-1 de penalti y San José el 0-2, acortando luego distancias Larrivey, en busca de la séptima plaza que dé acceso a Europa. Hubo tres novedades obligadas tras batir al Real Madrid con las bajas de Iraola, Mikel Rico y Carlos Gurpegui, siendo la principal novedad la entrada de Ibai Gómez en el once. Se nota cuando a estas alturas de campaña los equipos juegan un partido por semana, esa frescura les hace volar, como cuando salen los toros en los encierros de Iruñea. Así arrancó el duelo en Pontevedra, con los dos equipos presionando como descosidos, sabedores de que a ambos les gusta sobar el esférico, que sufren más sin él. Son de los que lo miman en esta Primera División tan flojita... la escuela Bielsa manda y la batalla en el centro del campo asemejaba a una entrega de Aliens versus Predators. Ahí mordían todos. Pero hoy día, si vas a la guerra, hay un equipo bilbaíno que pisa más fuerte que nadie y es muy mal rival... Gran meneo del Athletic en el primer tiempoLos vizcaínos, muy serios, cedían la posesión pero estiraban bien el campo con las cabalgadas de Oscar De Marcos, que generaron varios córners que sin embargo no fueron aprovechados, y el zigzagueo de Muniain. El navarro, pícaro, listo a las constantes caídas de Aduriz forzó un -discutido por la grada local- penalti a Augusto por empujón que el donostiarra transformaba por bajo en su diana número 11 del campeonato. Mientras los gallegos se encelaban con el tarjetero árbitro valenciano el Athletic se afanó en resolver. El respaldo del gol pudo ser mayor si el propio Aritz, de nuevo con el traje de Supermán por debajo de la camiseta, resuelve un uno contra uno frente a Sergio tras un gran robo de Williams, si no está Iñaki en fuera de juego en el segundo que anotó Aduriz, o si De marcos le pega a la pelota un pelín más bajo tras una gran combinación vasca. Menudo meneo. Era cuestión de tiempo. Tenía que llegar el 0-2, era merecido y el Celta estaba desnortado como un zombie, y vino, claro que vino, en el 32' de las botas de Mikel San José, el "imán", quien recogió un remate de Aduriz al larguero para empujar su cuarto chicharro en esta Liga. El balón parado permitía rentabilizar el trabajo de todos, y 'monetizar' ese momentazo de los leones. Les sale todo una vez olvidado el tema Europa, y eso que Aduriz no supo aprovechar en recta final un maravilloso pase en largo de un Iñaki Williams que sigue creciendo de manera exponencial. Fue tal el meneo que el 0-2 al descanso dio sensación de quedar corto. tal cual. Aduriz se lesiona y llegan los nerviosLa verdad es que el delantero de ébano, ya a tiro de firmar su nuevo contrato, le está dando al equipo muchas cosas: salida arriba, pelea, centros, desmarques, vamos que valga el oximoron, un mirlo blanco. Todo era demasiado bonito hasta que Aduriz, en el 53, se iba al vestuario con claros síntomas de sufrir una lesión en el adductor que veremos hasta donde llega. Su marcha supuso el retorno de Guillermo y la llegada de los nervios. O casi mejor dicho del pavor. Santi Mina recién entrado al campo probó los reflejos de Iraizoz, anunciando una media hora final delicada. Por parte local era, como siempre, Krhon Dheli el que llevaba la batuta lo que obligó al Txingurri a tomar medidas dando salida a Ander Iturraspe una vez superada su lesión de rodilla ante el Levante. No había pegado ni dos carreras el de Abadiño cuando Larrivey acortaba distancias, en plena empanada rojiblanca que veía su banda derecha con menos solidez en defensa que las coartadas de la infanta. Además Beñat bien pudo irse a la calle por un leñazo a Hugo Mallo cuando ya estaba amonestado. Gracias Mateu... Un segundo tiempo largo, largo, largo...El balón rondaba constantemente el área bilbaína, siendo Guillermo el único que se atrevió a asomarse y disparar en la otra parte del campo mientras Beñat y Muniain trataban de arañarle segundos al crono. Con la expulsión por doble amarilla de 'Sanjo' a falta de cinco minutos ya sólo quedaba perder tiempo, soplar para que la manecilla del reloj se moviera más rápido, como si la tocara el mentalista Uri Geller. Sabían tan bien esos tres puntos que cada vez que un rojiblanco se iba al suelo se veía el cielo abierto. Guillermo pudo zanjar el tema pero no acertó a bote pronto, falló las tres que tuvo hoy, y tampoco Larrivey fue capaz de firmar las tablas de cabeza, con lo que los 36 puntos ya eran una dichosa realidad. Esta semana, el viernes concretamente, el Athletic tendrá de nuevo presidente en la figura de Josu Urrutia, lo suyo sería celebrarlo brindándole la victoria en San Mamés contra el Almería. ¿No hay quinto malo, no? Que siga la racha.
