Williams, Sancet y Zarraga reactivan al Athletic y emocionan a San Mamés

Ya se sabe, cuando no está el gato los ratones bailan. Ante la cercanía del fin de año en el entorno del Athletic Club se oye hablar de Capa, de Estatutos, de Patxi Salinas, el Basconia o hasta de Kodro… Pero aquí lo realmente importante era ganarle al Real Betis este domingo en San Mamés. Los 8 partidos de LaLiga Santander sin vencer eran un lastre pesado en un año que concede tantas oportunidades de engancharse a Europa. Algo difícil de cambiar, ya que el Athletic no había marcado en cinco de sus 6 últimos partidos. Es más, llevaba tres consecutivos sin meter un solo gol hasta que hoy ha marcado Iñaki Williams a los 2 minutos de juego. Su doblete y el afortunado tanto final de De Marcos han servido para vencer, con un (3-2) a los andaluces, que pese a su actual poderío han caído ante un Athletic lleno de bajas. Hoy tal vez ha habido la suerte que faltó muchos otros días. El fútbol equilibra y se han hecho 3 dianas. No es broma: el Athletic llevaba diez meses y 36 partidos sin marcar tres goles. Y a todo esto... ¿sin minuto de silencio ni brazalete por Koldo Asua?

En fin. Marcelino se jugó la ira del personal al meter a Vesga en un once sin Zarraga ni Sancet que luego fueron claves para voltear el 1-2 en una recta final con sabor al viejo campo de San Mamés.

Ahora hay que rematar el año con la visita del líder, un Real Madrid azotado por la COVID... aunque dicen que Modric lo mismo estará el miércoles jugando en Bilbao. ¿Apostamos contra Florentino?

Un Athletic, con bajas muy importantes, que abre pronto el marcador

Tras el buen partido con pésimo resultado ante el Sevilla FC se firmaba cambiar el cromo ante los hispalenses. Todo ello sin dos baluartes como Unai Simón e Iñigo Martínez. La ausencia obligada de Dani García atisbaba un mediocentro Zarraga-Vencedor (que Marcelino no concedió para disgusto de muchos) junto a la anunciada titularidad del guardameta Julen Agirrezabala. El Betis venía cual tiro: se presentaba en Bilbao tercero en la tabla, con 4 victorias consecutivas y como segundo máximo goleador liguero. Su 4-2-3-1 se le atragantaba a los 2 minutos en una bella jugada combinativa vasca. Y eso que el gol de Iñaki Williams, dedicado expresamente a Koldo Asua, fue inicialmente anulado por un posible -mínimo- fuera de juego, pero el VAR de Iglesias Villlanueva lo validó tras tirar las líneas de colorines. Absurdamente no dio tiempo ni a celebrarlo cuando Juanmi hacía el empate de cabeza, en el 6', también en posición dudosa, pero legal, tras un primer despeje de Julen bajo palos. Un inicio alocado e inesperado, que pudo traer otra diana, como con el balón que le puso en una contra Willy a su hermano, al que éste no llegó por apenas centímetros, estando en boca de gol.

Tras un arranque supersónico el mejor trato de balón del Betis le dio cierto control del partido...

Los de Pellegrini andaban en más de un 60% de pelota y dominaron la parte final del primer periodo aún sin hacer ninguna oportunidad. Lo del Athletic eran más bien arreones, siempre por la banda derecha, con Nico Williams de protagonista; el tema es que el pase final siempre era defectuoso. Por h o por b siempre acababa dándose mal el esférico cuando se llegaba a la 'distancia del dinero'.

A Marcelino se vio que no le gustaba ver a sus chicos perder el centro del campo, y estar con el trasero demasiado pegado al marco bilbaíno.

El ver salir en la segunda mitad a Yeray fue una buena noticia porque pareció lesionado un poco antes y no menos ver intervenir bien a Agirrezabala ante un tiro de Fekir que, por cierto, pudo ser expulsado por una agresión. Se discutía eso cuando un error de Yeray dejó a Willian José solo ante Julen pero el ex de la Real la echó fuera. Pero fue el preludio del fin. El galo Fekir hizo un golazo en el 52' ante una retaguardia blanda que permitía al Betis entrar en el área a sus anchas para engatillar.

Vaya golazo de Iñaki Williams para el 2-2

Con la entrada de Zarraga y De Marcos, en el 54', se buscó reaccionar porque el choque se iba y con justicia además. Fueron buena medicina, el equipo se reactivó encontrando a Muniain y encendiendo a la grada al igual que con Berenguer y Sancet. En un pase de este último a Williams, Iñaki anotaba el golazo de la tarde con un obús de zurda que posterizó al meta Rui Silva. Era ya otro partido. El Athletic tocó la corneta, la grada rugía, y los Williams hacían astillas al Betis con el sonajero de Oihan y Zarraga. Una Catedral ardiente que tuvo incluso el buen gesto de ovacionar al eterno Joaquín cuando Pellegrini hizo un triple cambio final.

El delirio final fue la apoteósis...

Pero esa apoteosis esperaba, llegaba en el 89' con el 3-2 obra del veterano Oscar De Marcos, con mucha fortuna al dar en un rival, pero tras una bella jugada más de Oihan Sancet. Los 6 minutos de prolongación fueron una agonía porque esta victoria era muy necesaria y había pavor a encajar otro gol. No llegó. ¡Aleluya! Esto sí es como celebrar el 21 Santo Tomás.

Echando el cierre ante el Madrid

Último partido del año para los leones que les mide este miércoles (21.30h.), otra vez en el campo de San Mamés, al líder del campeonato, un Real Madrid que va lanzado en cuanto victorias, pero que llegará a Bilbao con varias ausencias por culpa de la pandemia. De todas ellas, sin duda las de Modric y Marco Asensio son las más destacadas.