Accionistas Unidos, escépticos y fundamentales, ya se mueven ante el órdago de Del Nido

Las primeras noticias sobre la intención firme de José María del Nido Benavente de volver a hacerse con la presidencia del Sevilla FC surgieron este jueves, por lo que vuelve a haber marejada en el entramado accionarial del club nervionense. Desde una posición externa pero fundamental, la asociación Accionistas Unidos del Sevilla ya están comenzando a moverse con cierto escepticismo, pero teniendo claro que su peso accionarial podría ser clave en un futuro próximo. ElDesmarque ha contactado con Moisés Sampedro, actual presidente de Accionistas Unidos, que ha detallado la postura del grupo que representa, uno de los principales oponentes a que el capital extranjero de Sevillistas Unidos 2020 entrara con peso en la entidad. La primera acción que tienen previsto es solicitar acceso al registro de accionistas, ya que no creen que los porcentajes que se han publicado en las últimas horas sean reales. “El lunes vamos a solicitar al consejo de administración que nos deje acceder al libro de registro de acciones nominativas, para investigar y saber a ciencia cierta si ha habido un movimiento tan grande en el capital social. Si ha habido esa compra tan grande de acciones y tener información fidedigna del estado actual de esas acciones. Si efectivamente se ha producido un vuelco con el que Del nido tendría una mayoría, o no, aunque entendemos que no es así”, explica. “Los datos de la última junta nos dicen que esos porcentajes son mucho menores, que Sevillistas Unidos 2020 representaba un 6,25% y hablar de que tiene casi el doble nos parece que no es acertado. Si realmente Del Nido tiene ese 40% del que se habla no tiene sentido que estén alimentando esta rumorología y no hagan lo que haría un grupo que tuviese la mayoría, convocar una junta extraordinaria y hacer valer esa mayoría, asegurándose ser presidente. Eso nos hace pensar que estos porcentajes no son acertados”, añade Moisés Sampedro.

La postura de Accionistas Unidos

La asociación que preside Sampedro aglutina alrededor de un 5% del capital social gracias a los pequeños accionistas, pero de momento no se decantan por un lado u otro. “Ahora mismo nuestra postura es estar a la espera de que se concreten los acontecimientos, solo hay rumores, que periódicamente los hay. Se están dando ciertos movimientos que hacen pensar que esta vez sí que hay un movimiento real por parte de José María del Nido, que va a intentar hacerse con la presidencia, pero entendemos que los porcentajes de los que se hablan no son ciertos”.

Unos movimientos de Del Nido que en Accionistas Unidos no han sorprendido tras ver la luz. “No teníamos noticias, pero sí es cierto que oíamos comentarios y no nos ha cogido de sorpresa. Tenemos información que nos dan nuestros asociados y esas cosas se oyen. Siempre existen esos rumores de que alguien está comprando acciones, pero en este caso sí que veíamos que esos rumores esta vez podrían ser un poco más ciertos, y la confirmación de que hay un movimiento detiene en la noticia que ha salido en prensa, en la que pide remover como representante a su hijo”. ¿Y la postura de Accionistas Unidos en una hipotética Junta? Pues estaría por decidir. “Soy un mero portavoz de la opinión de 1.000 sevillistas, lo que haríamos sería convocar una asamblea, pedir opinión a los agrupados y esos decidirían si votarían a favor de Castro, de Del Nido, o si tomaríamos una postura intermedia. Lo que estamos haciendo ahora es lo que hacemos siempre, solicitar al accionariado de base que se agrupe con nosotros y se una. Esa unión funciona y nos estamos viendo en un horizonte no muy lejano en que ese accionariado de base puede ser la llave que dé la presidencia a uno o a otro. Que esos sean los que decidan quién es el presidente, porque la lucha está muy igualada”. Por último, Moisés Sampedro aprovecha para criticar el pacto de gobernabilidad que se produjo hace ocho meses y que ha saltado por los aires. “Siempre dijimos que el pacto era un pacto por la pasta, ahora simplemente parece que lo que dijimos hace unos meses se ha confirmado. Ya con los bolsillos llenos, habiendo cobrado dividendos y remuneración a cambio de una estabilidad, y se ve que la había, pero a cambio de nada. No ha estado vivo el pacto ni un año. A los seis meses se ha producido la inestabilidad, se revela como un pacto por la pasta con el único objetivo de repartirse el dinero del club”, concluye.