Las claves y plazos del proyecto del tercer anillo del Sánchez Pizjuán

El proyecto de realizar el tercer anillo en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán se ha convertido en uno de los objetivos clave del actual consejo de administración del Sevilla FC. Los aficionados demandan más capacidad en el estadio y el club está dispuesto a asumir el esfuerzo, tal y como reconoció a principios de esta semana el presidente José Castro en la presentación de las obras de la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios. Sobre este tema ha ahondado el director general José María Cruz, que en declaraciones a la radio oficial del club ha puesto encima de la mesa las claves que, de momento, maneja el consejo de administración. “Un escenario realista sería el de tener estudiada la remodelación en un año, para poder acometerla y terminarla en un periodo de 4 o 5 años. El tercer anillo es por tanto un escenario a largo plazo, pero si no lo empezamos ya nunca lo terminaremos. Lo que hemos concluido es que ya se dan todas las circunstancias para que este proyecto tenga que acometerse”, ha explicado.

Cruz ha añadido que en la cúpula de la entidad tienen claro que las obras se pueden dilatar más de lo esperado, ya que no quieren que el equipo deje de jugar ningún partido en Nervión. “La intención del presidente y de este consejo es que se comience ya a realizar el estudio, que se analice a la mayor brevedad posible, que se busquen las fórmulas financieras para hacer esa inversión y que se pueda empezar lo antes posible, haciendo la obra por fases, porque uno de los retos es el de no dejar de jugar ni un solo partido en el Sánchez-Pizjuán mientras dure la obra. ¿Es posible? Sí, pero es más lento, más costoso, más incómodo, pero estamos decididos”. Además, Cruz recordó que ya hubo un planteamiento de remodelación del estadio, que fue desestimado con el tiempo. “No es la primera vez que estudiamos el tema. No lo hemos dejado de estudiar en ningún momento. Sí es cierto que en los últimos años no retomamos un proyecto que se elaboró hace ya más de una década de cara a la remodelación global del Sánchez-Pizjuán. Eran tiempos de bonanza económica en la sociedad en general, antes de que llegara la crisis y la recesión. En aquel entonces hicimos un proyecto en el que buscábamos compatibilizar un uso comercial de terceros en nuestro estadio con un uso deportivo. Aquel proyecto estaba basado en la reforma del estadio y en sacar el máximo número de metros cuadrados comerciales que fuera posible para cubrir y pagar la obra del estadio. Afortunadamente no nos metimos en aquel proyecto porque la situación económica cayó y bajó la rentabilidad de los metros comerciales”, recordó. “El planteamiento de ahora es el de maximizar el uso del estadio como estadio de fútbol. Para sacar el máximo número de metros cuadrados, exclusivamente para las necesidades del club. Nos hemos visto ‘forzados’ a esto, por el récord de abonados de cada año, por la demanda creciente de más asientos en el estadio, por los niveles de ocupación de los partidos que nos hacen ser optimistas. El nivel de abonados hace diez años estaba por debajo del 70% del actual. Tenemos que definir las prioridades, el número de asientos, cómo debe ser el tercer anillo, cómo se debe tramitar urbanísticamente y ver qué apoyo o respaldo va a tener el Ayuntamiento de Sevilla con el proyecto. Ver también si es posible cubrir todos los graderíos del estadio, aunque haya que hacerlo por varias fases”, culminó José María Cruz.