Así está la situación de Rubén Castro en el Betis

El Betis no puede vivir una semana tranquila, ni aunque haya un triunfo balsámico de por medio. Esta vez ha tocado el nerviosismo por la situación de Rubén Castro, su jugador más importante y cuyo futuro no está claro. Aunque hace unas semanas, según dijo el propio jugador en los medios oficiales del club, está pactada su renovación, la situación se ha ralentizado más de lo debido e incluso aquel acuerdo, ahora mismo, no parece existir. Rubén Castro tiene claras cuáles son sus pretensiones y el Betis, la otra parte decisiva en esta operación, también las tiene. El jugador, sin llegar a pedir las cifras de las ofertas de Catar, quiere dos temporadas sí o sí, sin dar muchos rodeos al asunto. Más que nada sentirse querido tras dar muchos goles, muchos puntos y mucho dinero al club en las últimas temporadas. El Betis, por su parte, se ha parado en un contrato de una temporada y otra más según objetivos. Y todas las que el delantero quiera, casi de por vida, pero siempre ateniéndose a unas cláusulas por objetivos que Rubén no ve con buenos ojos. El canario, que sigue dejándose la piel en el terreno de juego, y lleva cuatro goles en esta Liga (aunque tres jornadas seguidas sin marcar), se ha sentido muy molesto con el paso atrás en la palabra del Betis, sobre todo con Miguel Torrecilla. Una promesa que ahora no lo es porque en el Betis hay dudas de que Rubén siga rindiendo al máximo nivel. Hay quienes no meten una marcha más en la negociación para dar lo que pide el jugador porque temen que con sus 35 años deje de hacer goles y porque los asuntos judiciales que acompañan a Rubén desde hace unos años pueden saltar en cualquier momento. En los próximos días, una vez que Torrecilla ha vuelto de vacaciones y ha recuperado la operación, debe quedar resuelto, para bien o para mal, que pasará con Rubén Castro. El futuro del máximo goleador en la historia del Betis es, ahora mismo, una incógnita.