El Athletic aparcó el vermú a tiempo de entrar en Europa

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Mikel San José marcó de mediapunta (LFP).
  • Aduriz es el mensaje

  • Se acabó el chollo para el Athletic de jugar a las 12

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Más allá de las recurrentes teorías conspiranóicas, es cierto que las bajas, la fátiga y el estado del campo no ayudaron para nada, pero el papelón del Athletic Club en casa del colista Levante UD era de los que le tuercen el domingo al más pintado. Con un primer tiempo nefasto en el Ciutat de Valencia, cuyo césped estaba más duro que la cara de algunos políticos, y que conducía a los leones a la derrota, hubo que esperar a la bocina para vivir un alegrón en forma de igualada. Una increíble resurrección final, amparada en el éxito de los cambios (al entrar Susaeta y Lekue), le permitía cerrar un (2-2) con goles de Víctor Casadesus y de Xabi Etxeita en propia meta frente a los del propio Markel Susaeta en el 88' y de Mikel San José, este en el descuento. Un punto que permitía meterse en Europa en los estertores del encuentro y llegar a los 100 goles anotados en lo que va de curso. Lo cierto es que el partido vizcaíno fue muy malo. No se igualó la intensidad de los levantinos, ni en la presión ni en el despliegue, se cometieron errores gruesos atrás y en la salida de balón, con lo que se fugaron dos puntos importantes que dejan paso a toda una final el próximo domingo ante el Celta en San Mamés. pase lo que pase nadie quita la tercera clasificación continental consecutiva. Años de vacas gordas en Bilbao. Rompecabezas de onceBajas cada vez más amplias (Aduriz, Laporte, De Marcos, Merino...) obligaron nuevamente a Ernesto Valverde, a tener que darle bien al bolo para montar su mecano. Así Williams entró en el once, pero en banda, manteniendo Borja Viguera su nuevo status de punta titular, ocupando Bóveda el lateral derecho y San José el eje de la defensa. Enfrente Rubi, como no podía ser menos, metía cambios a la desesperada, apostando por los más combativos, dejando por ejemplo en el banquillo al fallón Deyverson. Conocido el percal los leones tenían la idea de presionar arriba, de incomodar a un contrincante que está de los nervios y, claro, enseñar que iba tan en serio como los granotas, quienes como aviso no paraban de rascarle el tobillo a Muniain con el arbitraje a la inglesa de Iglesias Villanueva, que tardó 35 minutos en sacar una amarilla. La hora del vermú...Ante un buen número de athleticzales presentes en el campo Raúl y Williams ya habían rematado, aunque mal, para los 5 minutos. Había, dominio pero el debe era el exceso de parsimonía. Es malo ir de sobraos, siempre se paga... Las contras levantinas (por la banda de Balenziaga) llevaban peligro y, de hecho, una le permitió a Casadesus marcar a los 13 minutos tras aprovechar un robo y un socavón en el eje de la zaga. Los centrales (Laporte no te vayas, por favor) estaban de visita en la Ciudad de las Ciencias, se supone, vamos. Se había firmado la peor forma de empezar: dando fe a un equipo que está medio muerto. Con su golito subió la moral granota y la intensidad de su trabajo defensivo. Tenían justo lo que no encontraban los de Valverde: ritmo y cohesión, porque el antaño llamado 'trote cochinero' era para verlo. Es imposible presionar si no van todos a la vez, es imposible romper líneas si nadie se desmarca... y así corría el cronómetro, con posesión (38-62%) pero viendo como las únicas llegadas con enjundia, salvo un cabezazo de Bóveda a balón parado, eran locales. Es más, Iraizoz salvó un par de tiros de Cuero en la recta final del primer tiempo tras otra peli de horror de la zaga vasca. El Athletic se la mete en propia meta Pese a empezar la segunda parte con un gol anulado al Levante el Athletic, rehecho, la tuvo en una magnífica contra que Viguera estrelló en el pie de Mariño. Una gran ocasión que, al no entrar, hizo a Valverde mover el banquillo: Susaeta y Lekue saltaron de la misma al terreno de juego, con lo que la banda derecha pasó a producir instantáneamente peligro. No es que se apuntara bien, pero al menos llovían centros y remates sobre el guardameta pontevedrés. Faltaba atinar ante unos blaugranas que ya se echaron atrás en busca de sentenciar a la contra. Lo malo es que les salió bien, porque en el 68' Etxeita tras perder la pelota encima acabó metiéndola en la meta bilbaína tras una buena parada de Gorka. Está vissto que la mañana estaba 'de que no', que dijera en su época de futbolista el Cuco Ziganda. El discurrir de los acontecimientos terminó vistiendo a Mikel San José de media punta en una posición que iba a dar sus frutos. Etxeita quiso rehacerse en el 80' con un gran remate pero Mariño estuvo en su sitio, luego Susaeta dio paso a la esperanza en el 88' tras fusilar una buena acción de Iñaki Williams, que se la servía en bandeja. Había tiempo para enjuagar la distancia, y San José de media punta, llegaba como Julen Guerrero en sus tiempos de gloria para marcar con mérito el gol del empate que le enviaba al equipo a Europa. Increíble. Una final ante el Celta en San MamésYa solo quedan cuatro partidos para que acabe la temporada 2015-16 para el Athletic Club, que este próximo domingo afrontará una final ante su máximo rival por la quinta plaza, el Celta de Vigo. Los de Berizzo visitan San Mamés a partir de las 12.00 horas. En ese duelo se espera la posible vuelta de Aritz Aduriz. Hay mucho en juego. La oleada de lesiones musculares de las últimas semanas lo demuestra. Hay que ser quintos.

@asismartin