La afición habló: "¡Pepe, vete ya!"

Una gran parte de la afición ha explotado en el encuentro del Betis ante el Eibar contra su entrenador, Pepe Mel, y tras el gol ha empezado a escucharse en el Benito Villamarín el grito de "¡Pepe, vete ya!". El cántico se ha podido escuchar en todo el estadio por una hinchada que, poco a poco, empezó a abandonar las gradas del feudo heliopolitano. Ya, desde la temporada pasada, y pese al ascenso, la relación de un sector de la parroquia verdiblanca con el técnico madrileño no era la mejor y este domingo se ha podido comprobar. De hecho, son muchos los encuentros en Heliópolis en los que no se escuchaba ya el "¡Pepe Mel, Pepe Mel, Pepe Mel...!". Las críticas contra Mel, pese a lograr el objetivo del ascenso y tener ahora al equipo bético en mitad de la tabla, no han parado en lo que va de temporada, pues parte de la afición y de la crítica entienden que la labor del madrileño deja mucho que desear. Éste, en una rueda de prensa en la que su rostro ha sido el espejo del alma, ha dejado claro que no va a aferrarse a su cargo y que ha puesto éste a disposición del club, por lo que ahora le toca a la planta noble y al director deportivo tomar una decisión sobre el futuro de un entrenador que ha lanzado un mensaje claro: "Nos queda un mes difícil". A 72 horas del choque ante el Sevilla, en la ida de los octavo de Copa, el futuro de Mel está en entredicho, aunque las soluciones, como él mismo ha dicho en rueda de prensa son claras: trabajar todos juntos, que el club fiche o, la más fácil, echar al entrenador. Una situación idéntica a la que pasó en la temporada del descenso de los 25 puntos.