Estos son los 15 alimentos básicos que no deben faltar en tu despensa, según la OCU
Los productos frescos son la base de nuestra alimentación, pero tener alimentos no perecederos también es clave
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Más allá de los productos frescos y de temporada, que deben ser la base de nuestra alimentación para que sea saludable, tener alimentos no perecederos en la despensa es clave para poder improvisar y salir del paso en algunas situaciones.
Los imprevistos no se planean y que un día llegues tarde a casa y no tengas nada en la nevera para cenar, o que la luz se corte y no puedas cocinar o que de repente tengas invitados, son cosas que pueden pasar.
Y para no pasar un "mal trago" ante estos escenarios, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) recomienda tener en la despensa de la cocina una serie de productos para poder tener comida sin necesidad de ir al supermercado.
Productos no perecederos que no pueden faltar en la despensa
- Arroz. Siempre y cuando se conserve en un lugar sin humedad, este producto puede durar mucho tiempo; incluso se puede consumir aunque haya pasado la fecha de consumo preferente.
- Pasta. Independientemente del tipo de pasta, este producto también es un gran socorrido, puesto que también se puede consumir aunque este "caducado"; siempre y cuando se almacene cerrado en un sitio adecuado y sin olores fuertes.
- Puré de patata en copos. Además de salvarte una comida, es una guarnición rápida y un complemento que te permite improvisar un puré de verduras rápidamente.
- Legumbres secas o en conserva. Son un producto muy versátil, que permite muchas preparaciones y que puede congelarse una vez cocinado, sobre todo teniendo en cuenta que recomiendan dos o tres raciones por semana.
- Harina y pan rallado. "Son un comodín necesario para muchas preparaciones" y duran mucho tiempo en la despensa, aunque pueden ponerse rancias, "sobre todo si son integrales".
- Conservas de pescado. Las latas de atún, mejillones, calamares (que no necesitan estar en la nevera)... duran hasta cinco años, e incluso, se pueden consumir pasada la fecha.
- Conservas de verdura. Al igual que ocurre con las de pescado, los botes de espinacas, guisantes, espinacas... duran mucho tiempo almacenadas en la despensa.
- Caldos, leche y derivados o bebidas vegetales. Tener un brik de caldo puede sacarnos de un apuro, al igual que las botellas de leche, de bebidas vegetales o de nata que se mantienen a temperatura ambiente.
- Aceite. El aceite de oliva, el AOVE o el aceite de semillas dura mucho tiempo, "siempre que esté protegido de la luz y del calor".
- Salsas. Los botes de mayonesa, tomate frito o pesto "son bastantes estables", aunque "una vez abiertos siempre deben de mantenerse en la nevera" y consumirse en un tiempo determinado.
- Encurtidos y aceitunas. Al contener sal y vinagre, los encurtidos y las aceitunas son productos muy duraderos.
- Frutos secos y fruta deshidratada. Además de ser un aperitivo perfecto, son "una fuente de energía concentrada". El matiz es que pueden ponerse rancios con el tiempo y si la bolsa no está bien cerrada.
- Azúcar, edulcorantes, sal o vinagre.
- Especias.
- Patatas y cebollas. Aunque son alimentos frescos, duran bastante tiempo en la despensa, siempre y cuando se mantengan "en zonas bien ventiladas, sin humedad, a oscuras, y alejados de fuentes de calor, para evitar que germinen".
Otros productos frescos o congelados
Además de los productos no perecederos (que aunque aguantan estables mucho tiempo, deben revisarse cada cierto), hay productos frescos que aguantan bastantes días en la nevera como los huevos o algunas frutas y verduras.
Asimismo, tener un congelador con guisos, algo de pescado y carne, y verduras "no te faltará de nada", concluye la OCU.