Los New York Knicks reinan en Las Vegas y conquistan la NBA Cup ante unos San Antonio Spurs que ya les citan en las Finales

En una temporada donde todas las miradas empezaron puestas en la continuidad de LeBron James en la NBA, los New York Knicks han aprovechado para proclamarse campeones de la NBA Cup tras imponerse a los San Antonio Spurs en la gran final disputada en Las Vegas, demostrando que la franquicia neoyorquina pasa por uno de sus mejores momentos en los últimos años, y se está consolidando poco a poco como un proyecto el cual ya apunta para ser candidato al anillo. El equipo dirigido por Mike Brown levantó el primer gran título de la temporada en un escenario inmejorable y ante un rival que, pese a la derrota, sale reforzado. Además, la mejor competición de baloncesto en el mundo ya se prepara para llegar a Europa.

Una final con sabor a éxito

El partido fue un el ejemplo perfecto del camino de ambos equipos en el torneo. Los Knicks empezaron abajo en el marcador hasta el final del tercer cuarto, pero un OG Anunoby perfecto, como casi siempre, se puso el mono de líder, con permiso de Jalen Brunson para marcar los tiempos tanto en anotación como en rebotes. El alero fue el que puso sentido a la ofensiva de Nueva York en el momento clave. En el último cuarto anotó seis puntos y cogió hasta siete rebotes, algo que permitió a los Knicks a darle la vuelta al marcador y conseguir una victoria más que importante por 124-113.

Los San Antonio Spurs, por su parte, liderados por Victor Wembanyama, no bajaron los brazos en todo el partido, pero estos pagaron la falta de experiencia en citas de este nivel.

El dato curioso de la NBA Cup

Más allá del resultado, la final deja un dato especialmente ilusionante para los Spurs. No es casualidad que los dos anteriores finalistas de la NBA Cup que cayeron en la final (Indiana Pacers en 2023 y Oklahoma City Thunder en 2024), terminaran jugando las Finales de la NBA ese mismo año o, como mucho, la temporada siguiente. Esto, es algo que encaja a la perfección con el crecimiento del equipo texano, que ya dio un golpe sobre la mesa eliminando en semifinales a los actuales campeones, los Thunder, con una actuación descomunal de Wembanyama.

Para los Knicks, el título supone un paso más en su particular escalada hacia la cima, el anillo de la NBA. Tras quedarse a las puertas de las Finales de la NBA la temporada pasada, cayendo en las finales de conferencia ante los Pacers, el conjunto neoyorquino se presenta ahora como uno de los grandes favoritos a dominar el Este. Con Brunson al mando, solo unos sorprendentes Detroit Pistons parecen capaces de discutirles el puesto.

Con dinero sobre la mesa, todo es mejor

Ya lo dijo Chet Holmgren antes de viajar a Las Vegas: “Cuando hay dinero sobre la mesa…”, contestando a la pregunta de por qué seguían jugando a nivel de playoffs en un partido de la ‘regular season’. La NBA Cup, ideada por Adam Silver es un acierto absoluto. Competitividad, emoción y una recompensa de más de 500.000 euros para cada jugador del equipo campeón, han convertido los partidos de mitad de temporada en auténticas finales anticipadas. Y en Las Vegas, los Knicks firmaron la suya propia.