Xabi Alonso y los cinco retos que marcarán el 2026 del Real Madrid
Recuperar a Vinicius y Bellingham es prioritario
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El Real Madrid afronta el inicio de 2026 en un momento delicado. Con el equipo inmerso en una evidente dinámica negativa, todas las miradas apuntan a Xabi Alonso, que apura sus vacaciones navideñas mientras el club se juega buena parte de su futuro inmediato. La posible nueva camiseta, las dudas con Vinicius y una Supercopa de España decisiva marcan una hoja de ruta repleta de desafíos para mantener vivo el proyecto blanco.
La Supercopa y la presión sobre el banquillo
El primer gran reto de Xabi Alonso es, sin rodeos, salvar su puesto. El técnico sabe que su continuidad pasa por una buena actuación en la Supercopa de España, una cita que puede servirle para ganar tiempo y frenar el runrún que rodea al banquillo del Real Madrid.
El equipo llega al torneo con dudas futbolísticas y anímicas, y el margen de error es mínimo. Una mala imagen podría acelerar decisiones drásticas, mientras que un título devolvería oxígeno a un proyecto cuestionado.
Xabi Alonso afronta este primer examen consciente de que no solo se juega un trofeo, sino la credibilidad de su idea de juego y la confianza del club.
Recuperar a las estrellas y hacer crecer el futuro
Más allá del corto plazo, el técnico tiene varios “debes ” marcados en rojo. Uno de ellos es recuperar a Dean Huijsen. El central, que pasa la Navidad lejos del foco, debe volver al nivel mostrado al inicio de la temporada para apuntalar una defensa necesitada de fiabilidad.
Otro nombre clave es Jude Bellingham. Su actitud nunca ha estado en duda, pero Xabi Alonso tiene la misión de reconciliarle con el juego colectivo y devolverle el peso diferencial que le convirtió en una de las grandes referencias del equipo.
Especial atención merece Vinicius. Mientras disfruta de sus vacaciones en Brasil, su rendimiento se ha ido alejando de la versión que le situó en la órbita del Balón de Oro. Recuperar a ese Vinicius es uno de los grandes desafíos del técnico. En ataque, también aparece Rodrygo, en quien Xabi siempre ha confiado y al que ahora deberá consolidar como fijo en la banda derecha.
Por último, el crecimiento de los jóvenes será clave. Gonzalo y Mastantuono están llamados a dar un paso adelante para que el proyecto tenga recorrido. Muchas tareas abiertas y poco margen para fallar.
