Un meritorio Athletic hizo sudar al Bernabéu
Aduriz es el mensaje
Sabin Merino: "Hemos dado la cara, duele perder así"
Tras el varapalo de Genk, al Athletic Club le tocaba cerrar la 'semanita' pasando no sé si por el dentista que decía 'Jokin' Caparrós, sino directamente por el proctologo. La visita al Santiago Bernabéu pintaba chunga. Siempre lo es, pero con dos días de descanso y 7 ausencias con tanto peso como las de Óscar De Marcos, Beñat, Yeray, Mikel Balenziaga o Aritz Aduriz,... el estropicio entraba con gama alta en las casas de apuestas. Pues hoy no fue así para nada. Al final la 'cosa', que diría Susaeta, ha quedado en un ajustado (2-1) para el Real Madrid con goles de Benzema y Morata que superaron el empate de Sabin Merino. Quien sabe si incluso pudo ser mejor si Sabin y, sobre todo, Iñaki Williams (que tuvo 3) aciertan alguna de las ocasiones clarísimas de las que dispusieron. Tanto, que el equipo mereció más premio que la derrota; pero perdonó demasiado. El Txingurri tuvo que meter seis novedades en su once, ya que hasta Beñat renqueante imaginamos se quedó en la banqueta, al igual que sorprendentemente un 'currela' como Susaeta, deparando un 4-4-2 con una formación inédita, especialmente en defensa, para medirse a la dichosa BBC esa. Para neutralizarla se optó por el mono de trabajo y la presión alta, había que fajarse aunque esta historia ya nos la sabemos. El Madrid te da sensación de buen rollo, llegas arriba, se forzaron un par de córners, uno con un buen disparo de Williams incluido que puso en apuros a Keylor Navas; pero en la primera contra un error garrafal de Saborit regaló el balón a Isco, quien asistió a Benzema para marcar a placer. Iban tan solo 7 minutos y ya vivíamos la habitual película en Chamartín. Con el marcador en ventaja, regalada por cierto, los laterales blancos parecían extremos, la pelota ni se olía y la tarde pintaba larga. Pero ahí salió el demandado ADN Athletic... Se sucedían los disparos locales, pero como siempre en su estilo montaña rusa los merengues te dejan opciones, en el 17' una de las pocas jugadas bilbaínas hilvanadas era pésimamente rematada de cabeza por Merino. Fue una ocasión clamorosa de empatar, pero el de Urduliz, el que más instinto de punta puro tiene, se iba a desquitar diez minutos después, tras una maravillosa jugada de Lekue, llevando las tablas al marcador. Tras 'lo' de Bélgica el lateral de Deusto se estaba gustando en el estadio más mediático. A Marcelo lo trajo mártir. Ahí pese a lo dicho por las casas de apuestas se disfrutaba de un largo rato de buen fútbol rojiblanco, robando adelante, hostigando como la lluvía a los de Zidane, con especial interés en una contra de Eraso que salió fatal, pero que parecía propicia como pocas para armarla. El mejor chivato es que el público se impacientaba, porque los leones estaban respondones, y eso que antes del descanso Iraizoz salvaba un uno contra uno con Ronaldo que sobre todo, como gran mal, dejaba tocado a Laporte en el tobillo. Los rezos de los athleticzales se oían hasta en Roma, y tornaron en aleluyas cuando el de Agen saltaba al campo en la segunda mitad, aunque las caras de dolor eran rotundas. Pese a la buena imagen vizcaína la duda era si la bombona de oxígeno iba a durar al contar con dos días menos de descanso. Y por eso daban ganas de llorar cuando Iñaki Williams perdonaba el 1-2 ante Navas tras mandar arriba casi un penalti frente el meta tico. Mamma mía Iñakiii... En el 60' Iraizoz atrapaba un flojo cabezazo de Benzema, cuando ya se empezaba a notar el cansancio vasco y la necesidad de mover el banquillo. Se empezaba a jugar demasiado en campo del Athletic, aumentaban las faltas, encima Zidane decidía adelantarse metiendo a Morata y a Lucas Vázquez por un Isco inadvertido. Lo mismo que un CR 7 fallón, claro que a este no le cambia ningún mister por si de la misma tienen que hacer las maletas... Es su problema, el nuestro era ver que chavales como Sabin o Saborit estaban medio muertos del gran esfuerzo realizado, por lo que Kovacic estuvo en un tris de hacer el segundo tras llegar libre de marca a cabecear. Hasta el 75' esperaba el Txingurri para sacar a Iturraspe por Rulo, que gallo, como siempre, se fue aplaudiendo mientras le decían de todo. Tras una ocasión de Bale entraba Susaeta, la misión ya era aguantar como fuera, algo que el gemelo de Saborit no compartía. Chillaba de dolor, pedía el cambio y Valverde miraba a su banquillo sobrepasado. Así debían estar sus jugadores ya que Susaeta y San José casi se hacen un 'giligol' en propia meta, que increíblemente se fue fuera. También increíblemente se le escapó el balón a Gorka en el 83' tras una buena parada previa ante Morata para que todo se fuera por la borda. Y eso que Williams tuvo su tercera de la noche, pero el chaval está de que no, lástima porque hoy se hubiera consagrado. Tranquilo, peor está Ronaldo que tras estrellar el balón contra Iraizoz en el 94' cuando iban tres blancos solos casi se lo comen. Ahí acabó todo. Van 12 años seguidos palmando allí... al menos esta vez se pudo empatar, aunque fuera a tres. Y la pregunta del millón: ¿Qué pidió Ronaldo en el gol de Morata? ¿Fuera de juego? Coger aire en un nuevo derbi A las huestes del Txingurri les llega por fin un merecido respiro. Al menos porque van a tener toda una semana para prepararse, recuperar jugadores y esperemos que también puntos en otro derbi, en este caso ante el CA Osasuna en San Mamés, será el próximo domingo a partir de las 16:15 horas. Ese choque y el siguiente del Genk, también en Bilbao, no se pueden escapar. 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