Logo de Fútbol
Fútbol

Continúa el desastre a domicilio

Correa y Vietto celebran el gol del Sevilla.
  • Así vivimos el Eibar-Sevilla

Compartir

Llegaba el Sevilla a Eibar con la firme intención de poner fin a la lamentable racha por la que atraviesa desde hace más de un año en los partidos lejos de Nervión. Y lo cierto es que todo parecía ponerse de cara para ello antes del descanso. Tras una primera mitad en la que los de Sampaoli jugaron a contraestilo de lo que pretende el técnico, los sevillistas, en dos contragolpes, parecían dejar el partido en franquía. Dos acciones a la contra que significaron un gol de Vietto y la expulsión del portero rival antes del descanso. Sin embargo, en la segunda mitad no se notó dicha superioridad. Con todo a favor para dominar el encuentro teniendo un hombre más, no hubo ni rastro del protagonismo ni de la posesión que, en principio, debe caracterizar a este equipo. De hecho, el Eibar, mucho más competitivo durante todo el encuentro, dominó también la segunda mitad, empatando el choque a los 60 minutos. Un conjunto armero que le dio una lección a su rival en cuanto a agresividad y presión arriba. Los sevillistas sólo realizaron un tiro a puerta en la segunda parte, ya al final, cuando incluso Álvarez Izquierdo había expulsado a otro jugador del Eibar. Un lamentable segundo tiempo en el que sólo Vitolo parecía darse cuenta de la oportunidad que se le estaba escapando al equipo. A pesar de estar todo el segundo tiempo con un hombre más, no hubo ni rastro del protagonismo ni de la posesión que pretende Sampaoli El partido parecía torcerse a las primeras de cambio. Rami, que ya estaba tocado a tenor del vendaje que tenía en el muslo, pedía el cambio antes del primer cuarto de hora. Escudero entró en sustitución del galo, pasando de esta forma Kolo al eje de la zaga. Así, los primeros 25 minutos fueron de dominio absoluto por parte del Eibar. La consigna de Mendilibar era clara: presión muy alta de los armeros, con mucha agresividad, en busca del error sevillista. A los 12 minutos, el cuadro local ya había avisado dos veces, por mediación de Kike. Entretanto, el Sevilla parecía esperar un contragolpe que nunca llegaba, mientras las ocasiones del Eibar se iban sucediendo. Los jugadores del conjunto armero se lo crecían cada vez más e iban arriba en la presión con mucha fe, ante una defensa sevillista muy nerviosa en la salida. Un tremendo error de Kolo en el 21 estuvo a punto de costar caro. El galo regaló la pelota, dejándola dividida en el área. Sirigu tenía que despejar y el rechace lo recogió Bebé, que tiró al cuerpo de Carriço. Poco después llegaba la más clara del Eibar, con una doble ocasión de Pedro León y Sergi Enrich en la misma jugada que rechaza la defensa del Sevilla. El asedio era evidente.Pero en esas, el Sevilla encontró la contra que buscaba. Kranevitter recuperaba la pelota para Kiyotake, que cogió el balón en el centro del campo, se adentró hasta la frontal y filtró un pase magnífico para Vietto. El argentino no perdonó con la puntera. El gol rebajó los ánimos del Eibar, mientras el Sevilla trataba de asentarse manteniendo la posesión del balón. Fue un espejismo. El dominio apenas duró 10 minutos, pues rápidamente se repuso el cuadro vasco, presionando otra vez muy arriba. Y cuando más desconectado parecía de nuevo el Sevilla, llegó otra contra de libro. Un gran pase de Ganso dejaba solo a Correa ante Yoel y el portero derribó al argentino en la frontal del área. El árbitro no lo dudó y expulsó al arquero, teniendo que entrar el joven Areitio. Finalizaba el primer tiempo con la sensación de que a la escuadra nervionense no se le podía escapar el partido, por delante en el marcador y con un jugador más sobre el césped. Sampaoli decidió mover el banquillo en el descanso, dando entrada a Vitolo por Ben Yedder. Apenas cuatro minutos después, tenía que agotar los cambios. Carriço se lesionaba y entraba en su lugar Iborra. Segundo cambio obligado en defensa.Los de Sampaoli dieron la sensación de querer protegerse con la pelota en los primeros minutos. Sin embargo, el Eibar siguió empujando, a pesar de tener un hombre menos, metiendo al Sevilla en su campo, que parecía cómodo en el papel de contragolpeador. Y en esas, en un balón perdido por Vietto, el Eibar montó un ataque que acabó con un centro de Luna para Pedro León, que remató a gol sin oposición. Empate y a remar en la media hora que quedaba. A falta de un cuarto de hora, el Sevilla estaba desconectado. Vitolo era el único que lo intentaba, pero se empeñó en hacer la guerra por su cuenta sin apenas producción.  Por sorprendente que pareciera, los de Sampaoli no habían tirado hasta entonces a la portería defendida por el joven Areitio. La ocasión más clara para volver a adelantarse la tuvo Vietto en el 83. El argentino recibía un pase desde la derecha de Vitolo y, a puerta vacía, mandaba la pelota fuera, para redondear su pésimo partido, a pesar del gol. Tres minutos después, Dani García dejaba al Eibar con dos hombres menos, después de una durísima entrada a Vietto por detrás. Por delante quedaban cuatro minutos más el descuento para tratar de arreglar el desastre por parte del Sevilla. Mercado remataba solo tras botar la falta, pero el portero atrapaba el balón. Ganso remataba también solo dentro del área chica y mandaba el balón fuera. Apenas generó peligro el Sevilla en lo que poco que se jugó hasta el final. Los de Sampaoli, en definitiva, dejaron escapar una oportunidad de oro para poner fin a una racha a domicilio que ya dura demasiado tiempo y que ya roza lo indecente.              Todos los resultados en resultados.eldesmarque.com