Errores demasiado caros

Era esperadísimo el Athletic Club - Real Madrid de este miércoles en San Mamés, pero el campo ni de lejos se llenó, era Medio Día del Club, ni los leones tuvieron su mejor día. La quinta jornada de Liga trajo carbón blanco. Los de Benítez maniataron la salida de juego bilbaína para vencer por (1-2) merced a un par de goles de Karim Benzema que superaron el del honor de Sabin Merino. Pese a mejorar mucho en la segunda parte, los rojiblancos pagaron sus errores, garrafal sobre todo el primero de Iraizoz y San José, sumando su segunda derrota consecutiva. La cuarta en cinco partidos del campeonato que convierten en TNT el derbi del domingo en Anoeta ante la Real Sociedad. Ni siquiera cabe culpar hoy a Mateu Lahoz por desgracia. Sigue faltando algo más de fútbol y la estrategia tampoco ha sido una baza.Once de galaTras la esperada polémica por la mega-rotación del Madrigal, siempre juzgada como caótica si el resultado es malo, ya se sabe, Ernesto Valverde esta vez introdujo hasta 5 cambios con respecto a Villarreal. O lo que es lo mismo, sacó prácticamente el once de gala, hoy con Sabin de enésimo inquilino del ala izquierda del ataque. Los leones, muy necesitados de puntos, iban a ir a fuego; así lo entendió Rafa Benítez que fortificó su centro del campo metiendo de salida tres pivotes: Kovacic, Modric y Kroos con idea de tapar a Beñat. Su plan fue bueno, ya que oculto el de Igorre o con De Marcos atado a Ronaldo, el Athletic se vio incapaz de progresar buena parte del encuentro. Una pifia mortalEl choque, nunca mejor dicho, arrancaba con la intensidad esperada, y eso que Aduriz se durmió cuando a los 2 minutos San José le había dejado casi delante de Keylor Navas para engatillar al costarricense. La presión era alta, como cabe pedir en un día con olor a Napalm en el ambiente. La pena es que luego la pelota duraba un suspiro, y ya se sabe que este Madrid de la era CR7 en las contras genera taquicardias. De hecho, afortunadamente, el punto de mira desviado de Benzema fue la nota dominante de un primer cuarto de hora de control merengue. Pero si te empeñas en ayudarle, como hicieron Iraizoz y San José en el 19' con una pifia de órdago, el gol lo mete hasta Cantinflas. El 0-1, frustrante, fue un bajonazo tremendo del que iba a ser imposible recuperarse. Susaeta abanderadoCon la congoja rojiblanca situada en modo pavor, el Real Madrid se fue arriba con idea de noquear a los bilbaínos. Llovían los disparos, la grada se comía las uñas, e iban a hacer falta muchos bemoles para darle la vuelta a la situación. Y, aunque a algunos les duela o sorprenda, Susaeta cogió la bandera de la resurrección. Suyas eran las mejores jugadas, pero no fueron suficiente para inquietar a los de Benítez que seguían estando más cerca del segundo. Hasta mandaban en los balones por alto o Kovacic, muy bueno, se atrevía con remates acrobáticos. Aduriz tuvo el empate en su cabeza en el 40', en posible fuera de juego, pero no le dio la suficiente fuerza a su remate; algo que sí hizo Kovacic poco después, pero Iraizoz, resarciéndose de su nefasto recado a Sanjo, sacó una gran manopla conduciéndose el duelo al descanso con ese preocupante tanto abajo. Pero al menos solo era uno. Pudieron ser más... El león se enrabieta La fuerte lluvia y un disparo del ariete del Antiguo -rechazado por Keylor- dio a entender que los vizcaínos salían con ganas de sangre en el segundo periodo. Un llamamiento al que Raúl García se apunta fácil, empezando a saltar chispas con Pepe, que vió la amarilla, mientras el equipo se desmelenaba. San Mamés rugía, el fútbol era mucho más directo, y a Mateu se le reclamaba un penalti por mano del central portugués que fue hombro. Aquello ya era otra cosa, aunque no se sabe si del todo buena. Primero una contra sensacional de Laporte, bien servida por Susaeta, permitía a Merino estrenarse en Liga en el 67' con un colosal remate en plancha que hacía el empate a uno y rompía la opción de récord de Navas. Pero seguido, en dos minutos, el de Urduliz no pudo seguir a Isco, que sin Balenziaga por medio, a placer, servía a Benzema el 1-2 volviendo a demostrar que su pegada es temible.  Se mueven los banquillosMetidos los primeros cambios, Jesé y Mikel Rico, Aduriz probaba fortuna en varias ocasiones, peros su remates salieron centrados siendo despejados espectacularmente por el meta blanco. Ibai y Kike Sola también entraron en busca de poner y cazar algún 'ovni' a la desesperada, con Raúl García incluso de mediocentro, mientras el Madrid se echaba descaradamente atrás con la entrada de Casemiro por Isco. Pero en esos casos hace falta un milagro, que no llegó, y el equipo de Florentino Pérez más rácano de los últimos años se iba a llevar el triunfo de La Catedral dando sensación de estar bastante cómodo. Y este domingo llega nada menos que el derbi de Anoeta ante una Real Sociedad que parece haber cogido aire de la mano del hat-trick de Imanol Agirretxe. Ya, eso daba igual, ese día del año en que les visitan unos señores de rojo y blanco ellos siempre salen motivados al 200%. Pero es que el Athletic ya no puede regalar nada más. Tiene 3 puntos de 15. Ah! Al Augsburgo le han caído 4 hoy en Mönchengladbach, por cierto (4-2). Pero eso no es consuelo. Para nada, pese a que se ha dado la cara. 

@asismartin