La alimentación, el ejercicio de fuerza y el descanso son las claves del éxito para ganar masa muscular. Además de esto, son muchas las personas que añaden un cuarto elemento y es la suplementación, como por ejemplo ocurre con la proteína Whey.
Para conocer en profundidad en qué consiste dicho suplemento, cabe explicar que dentro de la dieta, las grasas, las proteínas y los hidratos de carbono son los nutrientes más destacados para conseguir músculo; los cuales se deben consumir en unas proporciones adecuadas para alcanzar los resultados esperados.
Respecto a la proteína, el nutricionista Saúl Sánchez considera que, en rasgos generales, "lo ideal es garantizar un bolo de 0,3 gramos de proteína por kilo de peso corporal cada 3-4 horas", especialmente las personas más activas. Sin embargo, no todas son capaces de llegar a estos valores consumiendo solo carnes, pescados, huevos y lácteos; y es cuando entra en juego la proteína Whey.
Tal y como define el experto en nutrición, la proteína Whey "se trata de una fracción de proteína obtenida del suero de la leche considerada de alto valor biológico".
En grandes rasgos, "aporta todos los aminoàcidos esenciales y tiene una buena puntuación en cuanto a digestibilidad" y se utiliza tanto para "favorecer el crecimiento muscular", como "para alcanzar los requerimientos diarios del nutriente y prevenir la sarcopenia".
No obstante, este recalca que no todos los tipos de proteína Whey se obtienen de la misma forma, ni tienen la misma calidad; así como tampoco todo el mundo la debe incluir en sus rutinas dietéticas.
Siempre y cuando la calidad del suplemento sea óptima, tomar proteína Whey para ayudar a cubrir los requerimientos proteicos diarios, que es lo realmente importante, presenta una serie de beneficios:
El matiz que menciona Saúl Sánchez a cerca de la calidad del suplemento se debe a que "algunos cuentan con azúcares simples en su interior -con el riesgo de picos glucémicos si sobrepasa la dosis-" y otros presentan un "alto contenido en edulcorantes artificiales" para mejorar su sabor, pero a costa de "generar problemas digestivos" a medio plazo.
En cuanto a la forma de tomar proteína Whey, se puede hacer de diversas maneras, bien en batido mezclado con agua, leche, bebida vegetal o zumo, o añadiéndola en cremas de verduras, yogures, preparados para tortitas, salsas… Además, no hay un momento específico del día para tomarla, por lo que "aporta gran opcionalidad a las rutinas dietéticas".