El Ford Kuga está sentenciado
El Kuga, en su configuración actual, ya ofrecía variantes híbridas e híbridas enchufables
Ojos como platos al ver el precio del Ford Kuga Híbrido
El Ford Kuga, uno de los SUV compactos más representativos de la marca en Europa, se encuentra oficialmente en su última etapa comercial. La compañía ha confirmado que su producción cesará a finales de 2026, sin previsión de una nueva generación con mecánicas tradicionales o híbridas. Este anuncio supone el cierre de un ciclo para un modelo que, desde su lanzamiento, ha sido clave en la gama europea de Ford, especialmente por su equilibrio entre tamaño, eficiencia y versatilidad.
La decisión se alinea con una estrategia global que prioriza la electrificación completa de la gama y la optimización de recursos hacia productos con mayor rentabilidad a medio plazo. El Kuga, en su configuración actual, ya ofrecía variantes híbridas e híbridas enchufables, pero su planteamiento sigue ligado a una plataforma concebida para motorizaciones térmicas, algo que ya no encaja con los planes de futuro de la marca. La desaparición de su versión equivalente en Norteamérica, el Ford Escape, también marca el camino hacia una retirada coordinada a escala internacional.
Cabe destacar que el Kuga ha ocupado una posición central en el mercado europeo de SUV compactos, compitiendo directamente con modelos como el Nissan Qashqai o el Volkswagen Tiguan. Su diseño equilibrado, buen maletero y opciones mecánicas adaptadas a distintas necesidades lo convirtieron en una opción habitual tanto para uso familiar como para flotas. Su gama actual, además, contaba con versiones bien equipadas que combinaban conectividad, asistentes de seguridad y motorizaciones eficientes.
Un cierre que marca el final de una etapa
Por todo ello, el fin de la producción del Kuga no solo responde a un ajuste estratégico, sino que también representa un cambio de etapa dentro del catálogo de Ford. A partir de 2026, el fabricante apostará por nuevos SUV eléctricos y modelos con una identidad más marcada, que se ajusten a las exigencias de un mercado en plena transformación. Aunque no se ha anunciado un sustituto directo, todo apunta a que las futuras incorporaciones seguirán la línea de electrificación total.
El adiós al Ford Kuga pone punto final a una trayectoria comercial sólida, en la que ha logrado consolidarse como una de las opciones más equilibradas del segmento. Su desaparición refleja el nuevo rumbo que están tomando las marcas generalistas, centradas ya en la transición definitiva hacia una movilidad 100 % eléctrica.
