Ebro se lo pone muy difícil a Mercedes y compañía con un SUV de lujo para todos los bolsillos

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Ebro trabaja en su propuesta más ambiciosa hasta la fecha con el nuevo S900, un SUV híbrido enchufable de gran tamaño que apunta directamente al segmento premium. Con este modelo, la marca española no busca únicamente competir en términos de producto, sino también consolidar su imagen como fabricante capaz de ofrecer vehículos tecnológicos, sostenibles y con un enfoque claramente aspiracional. Con una longitud aproximada de 4,8 metros, el Ebro S900 se posiciona por encima del actual S800 y se sitúa en plena categoría D-SUV, un territorio dominado por firmas como Mercedes, Audi o Volvo. Lo destacable en este caso es que, a pesar de su enfoque de gama alta, mantiene una orientación de precio más contenida, gracias a una estrategia industrial basada en la colaboración con Chery y en la producción nacional desde la planta de Zona Franca, en Barcelona.

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El nuevo SUV de Ebro adoptará una configuración exclusivamente PHEV, combinando tracción total con una autonomía 100% eléctrica superior a los 100 kilómetros. Esta capacidad lo acredita para obtener la etiqueta “0 emisiones”, reforzando su perfil como vehículo eficiente y preparado para los entornos urbanos más exigentes. El modelo, además, integrará un alto nivel de equipamiento de serie, aunque se reserva la carta de la personalización para aumentar su atractivo en el mercado.

Un modelo de imagen, no de volumen

El S900 no está concebido para convertirse en superventas, sino como escaparate tecnológico y símbolo de madurez de marca. Su desarrollo parte de la base técnica del Chery Tiggo 9, aunque Ebro ha trabajado de forma específica en la personalización del diseño, los acabados y el equipamiento para dotarlo de una identidad diferenciada. En este sentido, cabe destacar la importancia de esta cooperación estratégica para mantener los costes a raya sin renunciar a estándares elevados de calidad.

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 EBRO S900

La garantía ofrecida, de 7 años o 150.000 km para el vehículo y 8 años o 160.000 km para la batería, refuerza la confianza en el producto y subraya su vocación de durabilidad. Por todo ello, el S900 se posiciona como una propuesta disruptiva en un segmento donde las marcas tradicionales han marcado el ritmo durante décadas. Su llegada podría suponer un punto de inflexión en la trayectoria de Ebro.