Carlos Alcaraz, un año para confirmar que el futuro ya es presente
Carlos Alcaraz cierra el año como número uno del mundo y con más títulos que nadie
Preguntan a Álex Corretja si Juan Carlos Ferrero entrenará a Sinner y su respuesta lo dice todo
La temporada de Carlos Alcaraz deja pocas dudas y muchos aciertos, aunque con un final un poco extraño tras la separación de Juan Carlos Ferrero. En un año marcado por la exigencia y una rivalidad que va a hacer historia en el deporte, el tenista murciano ha vuelto a demostrar que no es una promesa en construcción, sino una realidad más que consolidada en lo más alto del tenis mundial. Haber terminado el año como número uno del ranking ATP es el resultado a una temporada que, fuera de los pequeños inconvenientes, ha sido sobresaliente.
Alcaraz ha vivido un 2025 de nivel competitivo altísimo, especialmente marcado por una rivalidad cada vez más intensa con Jannik Sinner. Ambos han elevado el nivel del circuito y han convertido cada enfrentamiento en una declaración de intenciones. Tal ha sido así, que apenas han dejado títulos para el resto. El italiano ha sido el gran rival del español, empujándole a mejorar, a adaptarse y a competir en escenarios donde un pequeño error servía para que el partido o torneo se torciera del revés.
Una rivalidad para la eternidad entre Carlos Alcaraz y Jannik Sinner
Esta rivalidad pasará a la historia del tenis mundial, pero a día de hoy, ya es digna de admirar. En el supuesto caso de que mañana terminaran ambas carreras deportivas, los títulos obtenidos, los partidos, y la felicidad que han producido a todo amante del tenis, es inigualable e incalificable.
En cuanto a Carlos, y en lo estrictamente deportivo, los números hablan por sí solos. Títulos, finales y una regularidad que le ha permitido mantenerse en la pelea por el objetivo que buscaba desde que comenzó la temporada, el número uno del mundo. La campaña no empezó nada bien para los intereses del italiano con aquella sanción por dopaje. Fue ahí cuando, el pupilo entonces de Ferrero, dio un paso al frente y obtuvo todos y cada uno de los títulos posibles hasta el regreso de Sinner. De hecho, en su vuelta, el español le ganó en su casa, Roma, para arrebatarle el Master 1000 de su país.
La gota que colmó el vaso a una temporada que ya pintaba bien, fue la final del Roland Garros contra el mismo rival. En uno de los escenarios más importantes de la historia del tenis, Carlos Alcaraz le supo dar la vuelta a un resultado tan adverso que jamás antes habíamos visto algo igual. Con tres bolas de partido en contra y dos sets a uno abajo, el murciano se puso el mono de trabajo para conseguir uno de los trofeos que seguro, más recordará en su vida.
Una temporada para el recuerdo
A raíz de la vuelta de Jannik y la regularidad incansable de Carlitos, los torneos de Wimbledon, Cincinnati, US Open, el Six Kings Slams, y las ATP Finals han sido repartidos entre ellos en la final. De un lado o del otro iban a caer siempre, pero ambos lucharon como nunca para vencer a su máximo rival en cada final. El de Murcia se llevó, contando la final de Roma y el Roland Garros, un total de 4 títulos frente a 3 del italiano (en el cara a cara). Fuera de la lucha personal con Sinner, Alcaraz ha sido capaz de levantar también los títulos de Rotterdam, Montecarlo, Londres y Tokyo.
Todo ello sumado, y contando con que muchos de esos títulos se los arrebató a su máximo rival, fue capaz, a pesar de caer en las ATP Final de Turín, de terminar el año como número 1 de la ATP.
El peor momento del año para Carlos Alcaraz
Uno de los momentos más comentados del año ha sido, sin duda, la separación de Juan Carlos Ferrero, el técnico que le lleva acompañando desde que empezó a dar sus primeros pasos incluso antes de la élite. Una decisión que ha sorprendido al mundo del tenis, y donde aquellos que más saben han opinado al respecto. Figuras como Toni Nadal, Álex Corretja, Feliciano López o la mismísima Garbiñe Muguruza, han salido para comentar la extraña situación que nubla el que ha sido el mejor año de la carrera deportiva de Carlos Alcaraz y la cual está llena de alegrías y triunfos.
Con la mirada ya puesta en el 2026, es seguro que el joven tenista español querrá dar mucho más de sí y que nadie dude de que a pesar de los baches o errores durante el año, estará en lo más alto una temporada más.
