La nutricionista Natalia Sirvent detalla los beneficios para la salud de comer granada

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Imagen de archivo de una granada (Freepik)
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Entre las frutas de temporada de otoño se encuentra la granada, un alimento que destaca por su bajo contenido calórico y sus múltiples beneficios para la salud. Sin embargo, muchas personas la evitan por su dificultad para 'pelarla', a pesar de que combina con todo tipo de platos, tanto dulces como salados. Comer de temporada es una de las claves de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) para llevar una alimentación saludable y sostenible. Bajo esta premisa, la nutricionista Natalia Sirvent argumenta por qué debes comer granada en otoño y lo hace apoyándose de la evidencia científica.

Beneficios de comer granada para tu salud

Punicalagina, un antioxidante potente

La nutricionista comienza diciendo que la granada "ayuda a reducir la inflamación silenciosa" porque "tiene antioxidantes muy potentes que ayudan a proteger a tus células del estrés oxidativo", apoyándose de dos estudios que lo demuestran. Uno de ellos, publicado en 'Antioxidants', concluye que la punicalagina -un tipo de polifenol que se encuentra en la cáscara, las pepitas y el jugo de la granada- "puede ser un compuesto terapéutico prometedor para la prevención y el tratamiento de enfermedades crónicas asociadas con la inflamación". La otro estudio, publicado en la revista 'Investigación alimentaria aplicada', apunta que "la punicalagina reduce la inflamación, mejora la función cardíaca y combate el cáncer; inhibe las enzimas que causan inflamación; mejora la salud cardiovascular al reducir el estrés oxidativo".

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Ayuda a tu corazón

"Es un apoyo muy interesante para tu corazón", continua diciendo la experta en nutrición; y es que, "el extracto de granada posee efectos antihipertensivos, antiaterogénicos y cardioprotectores". Asimismo, también mejora "la presión arterial, la rigidez arterial y la composición corporal, todos los cuales son factores de riesgo potenciales en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares", concluye otro artículo de 'Antioxidants'. En otras palabras, "tomar granada de forma regular ayuda a bajar la tensión y a proteger tus arterias", resume Natalia Sirvent.

 Imagen de archivo de una granada (Freepik)
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Al sistema digestivo "le encanta"

A la microbiota del aparato digestivo "le encanta" porque "sirve como comida para estos bichitos buenos del intestino y eso se nota en la digestión, en la energía y hasta en la piel", añade la misma apoyándose de más evidencia científica publicada en 'Molecular Nutrition'. Además, la granada presenta un alto contenido en fibra, de forma que "ayuda a regular el tránsito y a mantenerte saciada de forma natural".

Protege tu piel y refuerza las defensas

Natalia Sirvent también destaca, de acuerdo a un estudio en 'Journal of Agricultural and Food Chemistry', que "sus antioxidantes ayudan a frenar la degradación del colágeno de la piel, mejorar la elasticidad y que se vea más luminosa a largo plazo". Por último añade que la granada refuerza las defensas porque "contiene vitamina C, antioxidantes y compuestos que apoyan el sistema inmune".

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