Benfica 1 - 4 Chelsea: Tras dos horas de suspensión y prórroga, los de Maresca, a cuartos con goleada

El Chelsea se ha metido en los cuartos de final del Mundial de Clubes después de ganar al Benfica en el Bank of Stadium. El cuadro de Enzo Maresca se impuso a los portugueses en un partido que estuvo suspendido durante más de dos horas por la amenaza de tormenta.

Reece James adelantó a los blue con un error de Trubin incluido y parecía ser definitivo, pero los de Lisboa salieron con todo tras la eterna pausa y lograron empatarlo in extremis.

En la prórroga, el Benfica se quedó con uno menos tras la expulsión de Prestianni y la inferioridad la pagarían cara. Hubo fiesta goleadora del Chelsea en los últimos minutos.

Poco fútbol en la primera mitad

Los primeros 45 minutos fueron un fiel reflejo del miedo a perder y marcharse para casa. Ninguno de los dos equipos arriesgó demasiado y las ocasiones que se vieron no fueron excesivamente peligrosas.

Marc Cucurella fue el que más cerca estuvo del gol. El lateral izquierdo se encontró con un balón suelto en el área pasada la media hora de juego y con la derecha buscó la escuadra de la portería de Trubin. Antonio Silva evitó con la cabeza que el balón entrase.

Unos minutos después, el '3' del Chelsea lo intentó con la izquierda. Esta vez tras recibir un balón a la espalda de su defensor e internarse en el área. Tampoco tuvo éxito.

Ni Ángel Di María ni Orkun Kokcu aparecieron para los lusos, que se limitaron a estar bien colocados cerca de su área

Reece James adelantó al Chelsea en el 64'

No se aceleró el ritmo en exceso en la segunda parte, pero los británicos parecían tener más hambre de gol y supieron aprovechar las ocasiones de las que dispusieron.

Reece James anotó en el 64' el tanto que desequilibró el partido, pero el gol llegó de la manera más inesperada. Pegado a la línea de banda en el carril izquierdo, el capitán blue se disponía a poner una falta. Aprovechando la intención de Trubin de salir a blocar el centro, ajustó el balón al palo, situándolo lejos del alcance del meta y adelantando a su equipo.

Intentaron reaccionar los portugueses, pero el Chelsea advirtió de lo que ocurriría si dejaban espacios. Liam Delap transformó un pase de Cucurella en un nuevo tanto de los londinenses, pero el ariete estaba en fuera de juego y el colegiado anuló la diana inmediatamente.

Cuando quedaban cinco minutos, la amenaza de tormenta -ya casi habitual en este Mundial de Clubes- irrumpió en Philadelphia y obligó a detener el encuentro durante más de una hora y media.

Tras la tormenta, Di María empató el partido

Apenas cinco minutos quedaban de encuentro, pero dio tiempo para que Malo Gusto provocase un penalti tras tocar el balón con la mano dentro del área. Ángel Di María no perdonaría desde los 11 metros y mandaría el encuentro a la prórroga. A los dos minutos de comenzar el tiempo extra, Gianluca Prestianni sería expulsado después de ver la segunda amarilla al cometer una dura entrada sobre Colwill. Con uno menos, el Benfica metió el miedo en el cuerpo a los de Maresca, que también generaron alguna ocasión de calidad. El 1-2 llegaría a trompicones. Moisés Caicedo recuperó el esférico en el centro del campo y remató a portería después de una conducción de Cole Palmer. Trubin frenó el disparo y el esférico quedó muerto prácticamente encima de la línea de gol. Allí apareció Christopher Nkunku para empujarlo a la media vuelta y decantar el marcador para el lado inglés. Poco después, Pedro Neto sentenció en un mano a mano ante el meta ucraniano con el tercer gol para su equipo. La fiesta londinense era ya total. Dewsburry-Hall, en otra contra, hizo el 1-4.