Giorgi Mamardashvili cierra el debate de la portería con tres paradas y 20 segundos de micro

ValenciaGiorgi Mamardashvili cerró el debate sobre su continuidad en la portería del Valencia CF con un gran paradón en el 50 y menos de un minuto delante del micrófono. El guardameta fue trascendental para que el Valencia CF sumara un punto en Girona. No porque no lo mereciera, sino porque, aunque se adelantó, los gerundenses tuvieron tres claras ocasiones (al margen del imparable gol de Stuani) pero siempre se encontraron con el georgiano como respuesta. Su actuación, que recuerda al mejor Mamardashvili, llega tras una semana movida, en la que recibió un mensaje del Liverpool: "Si no quieres competencia no vengas al Liverpool", y en la que se cuestionó su continuidad. Por eso, en cuanto acabó el partido, un gran partido, en apenas veinte segundos, y muy serio ante las cámaras soltó dos frases lacónicas. En DAZN dijo: "Buen partido y punto". y después en VCF Media se explayó algo más pero poco. Apenas 20 segundos: “Por un partido malo no soy mal portero y con un partido bueno no soy un buen portero”.

Las paradas de Giorgi Mamardashvili

Era un tono reivindicativo el de Giorgi pero tenía motivos de sobra para sacar pecho. En el partido hizo hasta tres paradas de mucho mérito. La primera en un primer tramo de intercambio de ocasiones, el Girona FC tenía en el minuto 12 su acción más clara en las botas de Miovski, que disponía de un mano a mano y a punto estuvo de sorprender a los valencianistas, pero el delantero rival mandó el balón fuera ante la salida de Mamardashvili. Tras el paso por vestuarios, en el 50 replicaría al instante el conjunto catalán, primero con una carrera de Danjuma y después con un remate picado de Arnau que sacaría Mamardashvili de forma providencial cuando Montilivi prácticamente cantaba el gol del equipo local. Fue una de las paradas de LALIGA y la verdadera reivindicación de que ha vuelto el mejor Mamardashvili.  

No contento con ello, en el minuto 72 cerraría el espectáculo mandando a córner un gran disparo de Danjuma. En ese momento, nadie en Montilivi se veía capaz de doblegar al cancerbero que ha enterrado cualquier debate.