La primera... y se llevan la cartera

El Sevilla ha perdido su primer partido de esta Liga ante Osasuna. Lo ha hecho en un partido tibio pero que en cualquier caso se decidió con una jugada polémica que aúna todas las características de las acciones que el Comité Técnico de Árbitros dijo esta semana que no debían sancionarse como penalti. Realmente, la "lucha contra los penaltitos", CTA dixit, ha perdido toda la credibilidad a las primeras de cambio. Imposible de creer que se actúe precisamente de la forma opuesta a lo expresado públicamente hace apenas horas. "Los penaltis tienen que tener sustancia, ser derribos claros y evidentes, no hay que pitar cualquier cosa". Eso dijeron Medina Cantalejo, Clos Gómez, este miércoles. Pues bien, la acción del Papu ni fue clara, ni fue evidente, ni fue trascendente. Pues penalti en contra del Sevilla. Esa pena máxima señalada por Del Cerro Grande decantó el duelo. Un duelo poco lustroso por parte del Sevilla, que en la primera parte sufrió a rachas, evidenciando su debilidad defensiva, y generó peligro a rachas, sobre todo cuando el Papu tomó la batuta en zonas de influencia. Lo primero, la debilidad defensiva, facilitó el primer gol del partido, tanto por el avance cómodo de Rubén Peña como por el remate plácido del Chimy ante la mirada de Gudelj. Lo segundo se vio en el empate, en la jugada empezada por Papu, continuada por él y la asistencia a Mir para que este marcara. Luego, al Sevilla le costó mantener el mando del partido. La presión local no permitió a Delaney y Fernando adueñarse del encuentro, aunque con el paso de los minutos el partido se volvió más pausado. Y la segunda mitad, antes del carrusel y las variaciones, la comenzó bien el Sevilla. Con poco remate, pero con mando. Justo cuando estaba mejor el Sevilla los cambios lo empeoraron. Bueno, los cambios y Del Cerro Grande. Fueron desapareciendo Mir, Tecatito, Papu, este tras el penalti, y el equipo hispalense se vio inmerso en los últimos minutos en una locura propiciada por esa pena máxima incongruente y por los cambios finales de Lopetegui, que pocos entendieron sobre todo viendo las acciones de los Ivanes, Romero y Rakitic. Al Sevilla se le escapó el primer partido. Está claro que el proyecto está incompleto, que hay deficiencias, sobre todo atrás, que faltan piezas también para dominar los partidos, pero con todo eso es posible que el partido no se hubiera marchado si no es por la intervención de Del Cerro Grande.