Ángel Gaitán y qué paso realmente con los Tesla en Semana Santa: "Se colapsó por los fanáticos de la marca"

Todos los españoles se acordarán de las famosas colas en los cargadores de Tesla en Cuenca durante la pasada Semana Santa. Mucho se ha especulado sobre cuáles fueron las causas de las horas y horas de espera para poder cargar los coches eléctricos. Pues bien, Ángel Gaitán -que ya dio una breve opinión hace unos días- ha estado en Horizonte, de Iker Jiménez, para aclarar realmente qué fue lo que sucedió.

"Hace justo un año, en los mismos cargadores de Cuenca, se hizo viral un vídeo en el que un apasionado de los coches eléctricos presumía de que había 12 puestos de carga y los 12 estaban cargando. Pero esta vez, no ha funcionado. De hecho, de los 12, había cinco o seis que funcionaban", comenta Ángel Gaitán.

¿Por qué colapsaron los puntos de carga de Tesla en Cuenca?

"La red de carga de Tesla es la mejor que existe, la más amplia, pero se queda pequeña para circunstancias específicas como estas, momentos de colapso. Tú me dirás que si no había más puestos de carga en los alrededores. Sí, los había, a tres kilómetros y no estaban tan saturados, pero ahí entran los fanáticos de la Marca (Tesla)", destapó el mecánico de Aranjuez.

Y es que el sistema de recompensa de Tesla para los nuevos clientes tiene mucho que ver en el colapso que hubo en la estación de carga de Cuenca durante Semana Santa: "El fanático de la marca, por recomendarte un coche, Tesla le da carga gratis durante 'x' kilómetros. Cada vez que alguien se compra un Tesla con mi código de referido, a mi me dan carga gratis, y sólo puedo cargar aquí (en las estaciones de carga de Tesla) por eso se colapsó tanto este punto entre tantas cosas. Además, había puestos de Iberdrola en frente y no funcionaban ninguno".

Gaitán explicó también en Horizonte qué pasa cuando dos vehículos cargan a la vez en un mismo puesto, y es que el punto de carga tiene que distribuir su carga máxima entre los dos coches, lo que hace que se multiplique por dos el tiempo de espera, llegando a estar entre una hora y media y dos horas para cargar al 100% un vehículo, lo que contribuye en sobremanera al colapso de estos puntos.

Además, la razón de que muchos cargadores no funcionen es que las empresas hacen una instalación básica para poder recibir las subvenciones del Gobierno y luego se olvidan de terminarlas al tener ya el dinero en el bolsillo.