Marc Márquez prefiere no condenar los pitos de la afición italiana en Mugello: "Había un poco de todo"

Marc Márquez ha vivido un sábado de lo más intenso en el Gran Premio de Italia. El de Ducati termina el día como el claro MVP de la jornada, tras haber sumado su sexta 'pole' de la temporada y la octava 'sprint' del 2025. Un trazado, el de Mugello, que parecía que se le iba a atragantar y... nada más lejos de la realidad. Por ahora es el hombre a batir y el claro favorito para la victoria de este domingo en la carrera larga. Sin embargo, la afición italiana le ha querido recordar su pasado y sus diferentes enfrentamientos con Valentino Rossi. Pese a que una gran cantidad de presentes le han aplaudido, hay otra considerable que le ha recibido con pitos. Aún así, Márquez prefiere quedarse con lo bueno, con lo positivo, y solo sacar buenas conclusiones del día.

La lucha con su hermano Álex ha sido frenética en las primeras vueltas. "Ayer Álex tenía más ritmo; hoy nos hemos igualado por la mañana y esta tarde se ha visto, íbamos los dos en la Sprint muy similares. Para mañana, primero tenemos que entender qué neumático trasero, porque el blando tiene bastante potencial, pero falta ver el consumo que hemos tenido en carrera. Y a partir de ahí, sea un neumático u otro, creo que los dos estamos muy similares de ritmo, pero, de momento, el primer objetivo, que era perder los menos puntos posibles, de momento hemos ganado, así que si mañana toca conformarse no será un problema", cuenta Marc en DAZN.

Marc Márquez y los pitos de la afición en Mugello

“Ya me ha ocurrido en el pasado, de tener toques raros ahí, sobre todo de la curva 2 a la 3, porque uno vuelve y el otro va. Un año ya me caí en un toque inesperado, que son lances de carrera en ese punto. Por eso tenía esa extra precaución”, añade sobre cómo ha vivido la carrera con el resto de rivales.

Y más allá de lo puramente deportivo, Márquez ha sido el protagonista en la grada del circuito. Pitos y aplausos han sido escuchados por toda la afición presente, pero él prefiere hacer oídos sordos. "Había un poco de todo, lo he visto. Espero que los que han aplaudido hayan disfrutado la remontada, que es lo bonito del motociclismo", zanja el catalán.