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El Barcelona no sale de la pesadilla de la Champions y el PSG le golea en Montjuic

Redactor de ElDesmarque

El FC Barcelona sufrió una dolorosa derrota en Montjuic que le dejó fuera de la Champions League. A pesar de partir con la ventaja del Parque de los Príncipes, los de Xavi Hernández acabaron en la desesperación por la expulsión de Araujo y Xavi que les terminó por hundir y seguir una pesadilla que continúa.

En la primera parte el Barcelona tuvo que lidiar con dominio parisino en los primeros minutos. Los de Luis Enrique sabían de la importancia de mantener la posesión y eso hicieron en los diez primeros minutos...hasta que apareció Lamine Yamal.

En un balón largo de Ronald Araujo al extremo, el joven de 16 años mostró lo mejor que sabe con un cambio de ritmo que le bastó para deshacerse de un jugador tan experimentado como lo es Nuno Mendes. Fabián no acudió en la ayuda y Lamine se metió hasta línea de fondo para meter un balón al primer palo que cazó Raphinha para rozar lo justo para meterla en el palo corto ante un Donnarumma que estaba de nuevo mal colocado.

La expulsión de Araujo cambió el ritmo

A partir de ahí fueron los mejores minutos del Barça, con un dominio en el mediocampo absoluto que se tradujo en varios acercamientos como el disparo arriba de Lewandowski dentro del área y con un gran manejo defensivo para mantener a raya a un Dembélé que no paraba de buscar la jugada individual. Incluso Ter Stegen sacó una mano abajo a un Mbappé que remató completamente solo al segundo palo.

Cuando todo parecía que el partido se ponía 2-0, llegó la gran polémica del partido. En un mal despeje de Ronald Araujo terminó arrollando a Barcola cuando se ponía solo ante Ter Stegen. Una acción que ocurrió fuera del área y el árbitro no dudó en mostrarle la roja directa. Un contratiempo que le dejó a Xavi sin diez, que se vio obligado a quitar a Lamine para dar entrada a Íñigo Martínez.

Con uno menos el balón fue dominio parisino, que insistió hasta que Ousmane Dembélé volvió a ser villano, cazando un centro raso que se paseó por todo el área culé hasta que le llegó al francés, que no perdonó fusilando un balón imposible para el alemán.

Ronald Araujo protestando por su expulsión en el Barça-PSG (Foto: EFE).

Una segunda parte de infierno

Después del descanso, el Barcelona fue todo un funeral. El PSG  seguía acercándose y aprovechó la superioridad numérica para que Vitinha soltase un latigazo desde fuera de del área que no pudo alcance Ter Stegen.

Con la eliminatoria empatada, la desesperación fue en aumento en un Xavi que fue expulsado a los pocos minutos por protestar una falta a favor del los franceses. Sin su central de confianza y su técnico, el Barça fue a la deriva a la mercede de la posesión absoluta rival.

Buscaron varios balones a Lewandowski pero nunca le encontraron. Cancelo cometió un penalti de cadete tras barrer a Dembélé de espaldas a la portería y Mbappé transformó por toda la escuadra la pena máxima. El Barça estuvo obligado a ir con todo y tuvo hasta en dos ocasiones el empate que hubiese forzado la prórroga tras un larguero de córner directo de Raphinha o un balón que el polaco estrelló en Marquinhos con Ferran totalmente libre de marca.

La entrada de Fermín y Joao Félix llegaron tarde y en un contragolpe que Ter Stegen sacó hasta dos manos prodigiosas, un mal despeje de Koundé dejó solo a Kylian para marca el cuarto definitivo. Infierno en Barcelona, de nuevo, en la Champions y con el Real Madrid a ocho puntos en Liga. Si pierden el Clásico, la temporada sin títulos se perfila como una realidad.

Mbappé, ante los jugadores del Barça (Foto: EFE).

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