Diego Llorente, del enfado por la mano no pitada a Fernando al cabreo por su penalti señalado ante el Sevilla

SevillaEl tema de las manos ha sido, posiblemente, uno de los únicos puntos que ha sido capaz de poner de acuerdo a los aficionados, jugadores y entrenadores. Casi nadie sabe, a día de hoy, lo que es sancionable o lo que no, lo que hoy te puede perjudicar pero mañana te puede favorecer. Casi ninguno lo conoce a ciencia cierta a pesar de las múltiples charlas arbitrales y Diego Llorente, jugador del Real Betis, ha sido la última víctima: el ahora central bético, de la mano no pitada de Fernando en Budapest a su penalti en el Sánchez-Pizjuán. Ha pasado poco más de un año, pero Diego Llorente aún lo tendrá en la mente. El ahora jugador del Real Betis fue uno de los jugadores que se enfrentó al Sevilla en la final de la Europa League en Budapest y, como hiciese su exentrenador José Mourinho, el zaguero no dudó en quejarse públicamente por ciertas decisiones arbitrales. "Han pasado varias horas desde que nuestro sueño llegó a su fin. Estoy triste por el resultado e indignado por algunas decisiones, pero muy orgulloso del trabajo de todo el equipo, que luchó hasta el final y mereció más", escribía en sus redes sociales evidenciando su descontento, principalmente, por una mano no pitada de Fernando Reges dentro del área.

Según el propio Diego Llorente, así como otros tantos compañeros de la Roma, aquella mano, a pesar de que estaba abajo y con los brazos prácticamente pegados, debía haber sido señalado, situación que choca ahora con sus declaraciones y su defensa en el Sánchez-Pizjuán.

Diego Llorente se expone a una dura sanción

Tras la cita, el jugador protestó ante los micrófonos y aseguró que "el árbitro se ha equivocado tremendamente en el penalti. Estoy de espaldas, el brazo está en diagonal hacia abajo, no como él dice. Encima nos miente en la cara. El VAR es una herramienta que está para eso, para que vaya a verlo. Se ha visto claramente en televisión que el brazo lo tengo abajo y es imposible saltar con los brazos pegados. Nos estamos cargando el fútbol". Tras dichas declaraciones, el CTA ha decidido denunciar al futbolista, que como ya sucediese con Sergio Canales hace algunas temporadas, podría perderse varias citas verdiblancas por sanción.