Menos de 90 horas para Caparrós
Después de tanto esperarlo, a Joaquín Caparrós se le está complicando el tramo final del mercado de fichajes, pues aún faltan piezas por llegar al Sevilla FC y también otras por salir. Para colmo, la operación que tenía cerrada está a punto de esfumarse. El utrerano está a punto de sufrir su gran varapalo en sus primeros meses como director de fútbol del Sevilla. Si no sentó bien en Nervión ver como su objetivo número uno para la delantera, Michy Batshuayi, se marchara al Valencia, lo de Mariano Díaz es la gota que colma el vaso.
Caparrós había llegado a un acuerdo con el jugador y había conseguido lo más difícil, que Jean-Michel Aulas, presidente del Olympique de Lyon, accediera a venderlo por aproximadamente 35 millones de euros. Sin embargo, el Real Madrid está decidido a ejercer el derecho de tanteo que tiene sobre el delantero, así que el trabajo del utrerano lo va a aprovechar el club merengue. Así las cosas, se vuelve al punto de partida en el asunto del ‘9’ referencia que lleva pidiendo Pablo Machín desde que llegó. Con el dineral que le había ofrecido al Lyon en el bolsillo y poco tiempo, mucho deberá afinar el director de fútbol para cubrir el puesto con un jugador de similar nivel al de Mariano.
Otros frentes
En materia de fichajes, Caparrós tiene además otros frentes abiertos. Por un lado, buscan un jugador atacante que pueda jugar por la banda. En ese sentido, el que más posibilidades tiene es Portu, por el que se ha avanzado en los últimos días. Machín lo tuvo en el Girona y quiere tenerlo en el Sevilla. El último puesto en el que trabaja el Sevilla es el de defensa central. Con la salida de Pareja y la probable de Carriço, en Nervión quieren a un efectivo más que complete una línea de al menos cinco centrales natos, uniéndose a Kjaer, Mercado, Sergi Gómez y Gnagnon. Además, Amadou puede ocupar ese puesto en caso de emergencia. El que más ha sonado es Boyata.
Las salidas, otro problema para Caparrós
Aunque menos mediático, el gran problema de Caparrós es el de dar salida a los hombres con los que, en principio, no se cuentan. Son un total de tres jugadores. Son, en concreto, Borja Lasso, Ganso y Carriço. El primero apunta al Granada, el segundo sigue enrocado en su postura y si se marcha será perdiendo el club mucho dinero, mientras que el tercero tiene algo más de cartel y podría regresar a su país o incluso continuar en LaLiga Santander. Además, hay más jugadores que podrían marcharse. Si finalmente llega un delantero, Ben Yedder tendría muchas papeletas, ya que no es del gusto de Machín. Tampoco está clara la continuidad de Luis Muriel, por el que el Sporting de Lisboa está muy interesado. En Nervión no se vería con malos ojos la salida de ninguno de los dos, pero antes tiene que venir alguien para el ataque. El caso es que el mercado cierra el próximo viernes a las 23.59 horas. Tic tac, la cuenta atrás apremia a Caparrós.