El Valencia se olvida de ganar

Así vivimos el partido
El Málaga hurga en la herida de los goles en contra
Medrán y Rodrigo harán de Enzo y Nani
El Valencia CF se olvida de ganar y empató ante el Málaga en un partido feo en el que remontó rápidamente el gol inicial de Fornals gracias a los tantos de Rodrigo y Medrán, todos en la primera parte. A partir de ahí el Málaga fue mejor y presionó, tuvo más ocasiones, parecía que la defensa del Valencia por fin iba a funcionar y supo, durante 92 minutos cerrar un triunfo que era importantísimo para escapar de la parte baja de la clasificación y recuperar la confianza. Nada más lejos de la realidad. Cuando el estadio saboreaba la victoria, Pablo Fornals de nuevo, en una de las decenas de llegadas andaluzas en la segunda parte, logró el definitivo y decepcionante 2-2. No tenía muchas opciones, pero tampoco Cesare Prandelli quiso sorprender a nadie y apostó de inicio por el 5-3-2 y un once muy similar al que ganó y convenció en Leganés, con los cambios obligados por lesión. Es decir, Medrán se mantenía en la medular y Rodrigo volvía a la titularidad por el lesionado Nani. A las primeras de cambio, sin embargo, cualquier previsión se fue por el área. No habían transcurrido dos minutos cuando Pablo Fornals inauguraba el marcador. Una jugada por la banda derecha del Málaga acabó en un centro despejado defectuosamente que dejó el balón en la frontal donde Fornals la engatilló lejos del alcance de un Diego Alves desesperado y que no sabe qué hacer ya para secar la sangría de goles encajados. 0-1 y todo el partido por delante. El ambiente, frío y desangelado, se congeló por unos instantes. Por fortuna para los intereses del Valencia, casi inmediatamente después el conjunto de Mestalla lograba el empate. Parejo sacaba una falta lateral desde tres cuartos de campo y Rodrigo, libre de marca entrando al primer palo, hacía de cabeza el segundo. 1-1. Rodrigo, cuando más cuestionado estaba, lograba el empate.El público despertó tímidamente, pero daba la sensación de que Mestalla estaba vacío. Se escuchaba el golpeo del balón y los gritos de los futbolistas. Sólo algún lance aislado sacaba al público de su letargo. Sobre el césped las imprecisiones de ambos equipos se imponían a los aciertos. Al filo de la media hora el Valencia acumuló un par de llegadas seguidas que sacaron al público de su hastío. Rodrigo, hipermotivado, las luchaba todas y la afición se lo premiaba; al tiempo que gozaba con algún corte poco ortodoxo de Abdennour. Parecía que se tomaban a broma al central tunecino. Su costado, con Siqueira pegado en banda, era el más débil, y por ahí Ontiveros llevaba buena parte del peligro andaluz.

Sin embargo, la fortuna que otras veces le fue esquiva al conjunto de Mestalla, esta vez les sonrió. Así, un centro de Parejo que salió rechazado por un defensa andaluz, llegó franco al punto de penalti, dónde Medrán entrando como una exhalación, confirmaba la remontada. 2-1. La respuesta no se hizo esperar y Rosales, primero, y Fornals después, probaron los reflejos de Diego Alves ante un Valencia que ganaba pero que no ponía la intensidad atrás que el partido requería.
Al descanso con victoria por fin
Con este panorama se llegó al descanso, tiempo tras el cual la tónica cambió poco. Por primera vez en toda la Liga el Valencia se iba al vestuario con ventaja en el marcador, pro no sin sufrir. Y es que, el Málaga seguía teniendo sus opciones, mientras el Valencia quería esperar agazapado para salir a la contra y sentenciar. La apuesta era arriesgada y Camacho casi le da un disgusto a los escasos 23.000 aficionados. Siqueira, fundido, dejó su puesto a Gayà. En el 5-3-2 los laterales sufren mucho y ante el acoso del Málaga, tocaba refrescar las líneas. Por eso, poco después, sería Fede Cartabia, el que entrara al campo en lugar de Dani Parejo, ovacionado la primera vez que ha sustituido en madrileño en toda la temporada. El Valencia sufría, el Málaga lo tenía encerrado y a balón parado le ponía en serias dificultades. Sin embargo, en una contra, pudo llegar la sentencia, gracias entre otras cosas al error del meta Boyko, hoy titular en detrimento de Kameni. Al cancerbero se le escapó el balón de las manos, pero los puntas valencianistas no supieron aprovecharlo. Prandelli, sin embargo, no lo veía claro. La presión del Málaga era asfixiante El partido se estaba jugando demasiado cerca de su portería y sacó a Santi Mina por Munir, aplaudido y fundido tras el esfuerzo de los primeros 83 minutos de juego. El equipo siguió sufriendo hasta el final. Sus contras eran poco efectivas y la agonía de verse encerrado ponía nervioso al más pintado. La lluvia, a modo de telón de fondo final, hizo acto de aparición para sellar un gafe con el que el Valencia pone punto y final a un año liguero lamentable como local. Fornals aprovechaba el enésimo rechace en la frontal de una zaga saturada y encerrada y con un trallazo sellaba el empate, justo para los méritos de ambos conjuntos. Todos los resultados en resultados.eldesmarque.com
