Luis Rubiales se mantiene en que fue un beso consentido y un gesto entre amigos: su testimonio al completo

Sexto día de juicio a Luis Rubiales y la expectación era máxima ya que se esperaba la declaración de todos los acusados y dos peritos. Finalmente, solo testificó el expresidente de la RFEF debido a que las testificales se alargaron. Comenzó testificando David Morillo. Un perito de parte de Luis Rubiales que analizó dos videos para la lectura de labios. "Aproximadamente dos segundos analizamos esa comunicación verbal. Leí que decía '¿te puedo dar un besito?'. Sin duda. Lo he visto varias veces y lo tengo claro". El perito quiso dejar claro que no había fallo en su análisis y que no cabía dudas de que hizo esa pregunta, a pesar de que también afirmó que no tiene “titulación oficial, no existen cursos oficiales sobre este tema”, refiriéndose a la lectura de labios. El siguiente en hacerlo fue Abel Baños un experto que determinó que no se habían manipulados los videos que se habían analizado para la lectura de labios y que el que cogieron de TikTok para ellos era tal y como estaban en redes sociales.

El testimonio de Luis Rubiales

Tras testificar estos ante las diferentes partes era turno para Luis Rubiales. El expresidente de la RFEF hablaba sobre el beso y las presuntas coacciones que se cometieron después. "Ya habían pasado los árbitros y el equipo que había perdido. Les tocaban a nuestras jugadoras. Jenni, cuando se acercó a mí, me hizo un gesto porque había fallado un penalti. Eso fue tremendo para ella. Yo le dije que olvidara el penalti, que somos campeonas y que esto es gracias a ella. Ella me apretó de las axilas, me levantó y al caer le pregunté que si podía darle un besito y se lo di. Eso es lo que ocurrió", fue su versión del beso. También niega que la hiciera salir del vestuario para hablar de este asunto. "Para nada. Había una cámara de la FIFA a cinco metros. Realmente, si yo hubiera hablado del beso, no habría pedido la grabación de FIFA. Había mucha gente en la conversación entre ambos. Había gente de un lado para otro. La persona más cercana era Chema Timón, la jefa de la delegación y más gente". [video_mediaset id="61272"] "Yo no iba a entrar a un vestuario de mujeres sin avisar por si se estaban duchando. Jenni me dijo que entrara y entramos los dos juntos. Entramos agarrados, ella me llevaba de la cintura y yo, del hombro. Fue un momento más de celebración". Se desmarca también de que pidiera a Jorge Vilda que fuera a hablar con los familiares de la jugadora. "No, en ningún caso. Él me dijo que habló con el hermano de Jenni. Yo no sabía ni que estaba allí. Al final, cuando pasó un tiempo, me comentó que su hermano iba a hablar con ella para ver si quería hacer unas declaraciones. Yo en ningún caso le mandé a nada. No me dijo para qué iba a hablar con ella. Creo que iba a ayudarla". En definitiva, Luis Rubiales se ha mantenido en su postura y ha negado todo de lo que se le acusa.