El SUV 'made in Spain' que llega para robarle a MG y a su ZS

La mítica EBRO aprovechó el Automobile Barcelona 2025 para presentar su gran apuesta: el nuevo EBRO S400. Se trata del primer coche híbrido autorrecargable (HEV) de la firma, que busca posicionarse como una alternativa a modelos superventas en España como el MG ZS.

Estamos hablando de un SUV que mide 4,32 metros de largo, lo que lo sitúa en lo alto del segmento B-SUV, compitiendo con modelos como el Peugeot 2008 o el Toyota C-HR. Y ofrece un maletero de 430 litros de capacidad. Un nuevo todocamino ideal para la circulación urbana y para escapadas de fin de semana, cuya fabricación 100% española. El modelo se ensambla en la renovada planta de la compañía en la Zona Franca de Barcelona, donde ya se han iniciado las primeras pruebas de ensamblado.

El EBRO S400 se estrena con un sistema híbrido de 211 CV y 5,5 litros a los 100 km

A nivel técnico, el nuevo SUV de EBRO destaca por su sistema híbrido. Está basado en un gasolina1.5 DHE de 95 CV, asistido por un motor eléctrico de 204 CV. En total entrega 211 CV. Gracias a la tecnología autorrecargable, este EBRO S400 no necesita enchufarse, lo que garantiza una experiencia cómoda y sin complicaciones. Además, cuenta con la etiqueta ECO de la DGT, lo que le permite acceder sin restricciones a zonas de bajas emisiones en grandes ciudades como Madrid o Barcelona. Y deja unas buenas prestaciones, con un consumo de 5,5 litros a los 100 km y 9 segundos para hacer el 0 a 100 km.

Carácter premium y un precio muy competitivo

Su precio tampoco está nada mal. Parte desde los 27.490 €, lo que lo posiciona como una alternativa muy interesante frente a sus rivales. Y lo hace con un equipamiento muy completo de serie, que incluye asistentes de seguridad, tecnología multimedia y ayudas a la conducción que normalmente se reservan para versiones superiores.

El EBRO S400 no llega solo. Se suma a una familia en crecimiento que ya incluye al EBRO S700, y al próximo EBRO S800, que será 100% eléctrico. Esta ofensiva muestra que EBRO ha vuelto para quedarse, con una identidad clara y una propuesta competitiva que ya desde el principio está dispuesta a marcar perfil.