La pista central de Wimbledon volvió a reunir este domingo a dos de los nombres más populares del tenis actual: Emma Raducanu y Carlos Alcaraz. La británica presenció desde la grada el partido de octavos de final del español ante Andrey Rublev, alimentando así los rumores sobre una posible relación entre ambos. Sin embargo, Raducanu volvió a insistir en que solo les une una amistad.
Emma Raducanu, presente en Queen's y ahora en Wimbledon
Raducanu ya había asistido a uno de los partidos de Alcaraz en Queen’s, torneo que acabó ganando el murciano. Este sábado repitió gesto en Wimbledon, acercándose a la pista central para seguir el encuentro del actual campeón frente al ruso Rublev. La presencia de Emma en los partidos del español no ha pasado desapercibida para los medios ni para los aficionados, que siguen con atención cada coincidencia entre ambos.
Una amistad forjada desde 2021
Ambos tenistas se conocen desde Wimbledon 2021, cuando coincidieron en el torneo por primera vez. Según ha explicado la propia Raducanu, durante el US Open de ese mismo año se mantenían en contacto constante. “Verle ganar me motivaba. Fue bonito vivir ese torneo juntos”, confesó la tenista, que alcanzó en 2021 el título en Nueva York mientras Alcaraz daba sus primeros pasos en la élite.
Los rumores sobre una posible relación sentimental han crecido en los últimos meses, sobre todo tras ser vistos juntos en eventos y en el propio torneo. Sin embargo, Emma fue clara al ser preguntada por los periodistas: “Solo somos amigos”, dijo entre risas. “Me alegra que la gente se esté divirtiendo con todo esto en internet”, añadió con humor.
Del peloteo al dobles mixto
Su complicidad se ha visto también en la pista: en los últimos días se han publicado imágenes de ambos entrenando juntos y compartiendo campañas publicitarias. Este vínculo se formalizará en agosto, cuando disputen juntos el dobles mixto del US Open, algo que ambos han celebrado públicamente. “Carlos me lo propuso a principios de año. Me sorprendió, pero por supuesto acepté”, declaró Raducanu.