Fernando Alonso y la reacción al ver a un niño japonés vestido con la bandera de Asturias: le hace un regalo que nunca olvidará

Fernando Alonso sigue en su salsa en el Gran Premio de Suzuka. No por los resultados tras los dos entrenamientos libres, sino por el recibimiento que está teniendo con toda la afición local. En cuanto a lo deportivo, la primera jornada ha sido algo extraña. La FP2 es como si no hubiera existido para la gran mayoría de pilotos por una lluvia que nadie esperaba. Aún así, las sensaciones de Alonso al volante del AMR24 son positivas y espera seguir en la línea de las tres anteriores carreras.

"Lo de hoy no cuenta mucho. No deberíamos estar en una posición muy diferente en comparación con Australia, por lo que creo que seguiremos siendo el cuarto o quinto equipo más rápido. Bo podemos decir mucho. Suzuka es genial, agradable de pilotar, poco más podemos decir. Una lástima para los aficionados, vienen al circuito a animarnos y no tenemos neumáticos para rodar, lo siento por ellos. Siempre generan un ambiente fantástico, ojalá mañana y el domingo podamos ofrecer algo de entretenimiento", confiesa el asturiano desde el trazado japonés.

Fernando Alonso con sus fans más pequeños

Ese sentimiento que tanto gusta a Fernando Alonso respecto a la afición japonesa se está viendo representada en muchas situaciones diferentes. Momentos en los que el español es el claro protagonista. Y es que hay historia de todos los colores. Desde un aficionado que aprendió español nada más conocer la existencia de Alonso para poder hablar con él, hasta niños vestidos de arriba a abajo con los colores de Aston Martin y Asturias.

Esto último es precisamente lo que más ha llamado la atención de Alonso. En un vídeo difundido por redes sociales, se puede ver cómo Fernando se acerca a uno de sus mayores fans en el paddock. Un niño que está totalmente enfocado en apoyar a su ídolo: gorra de la época de Renault, camiseta azul con la bandera de Asturias y algún cromo muy especial. Ante esa imagen, Alonso no lo dudó en ningún momento, se acercó al niño y le regaló una gorra firmada. Un momento que, sin lugar a dudas, nunca olvidará.