Nervios, 'batallitas' y mucho trabajo en el estreno de los Neville

El Valencia CF de Gary Neville se presentaba en Mestalla delante de su público en un partido a vida o muerte en el que se jugaba el futuro del club en la Liga de Campeones. Demasiado partido para un equipo que está en construcción, en una fase en la que tiene que ir adquiriendo las ideas de la libreta del entrenador inglés, pero además, le llegó el choque ante el rival más físico del grupo, el Olympique de Lyon, y lo hizo tras su enorme desgaste ante el Barcelona. Tras la llegada del Valencia CF a Mestalla, los hermanos Neville pronto salieron al césped para repasar los últimos conceptos dados a los futbolistas y se les vio nerviosos por lo que tenían por delante.

Las manos de Gary Neville no podían estar quietas: moviendo su anillo de casado, mirando el reloj, arreglándose el traje en cada momento que si me abrocho el botón, que si me estiro la corbata, que si me subo el pantalón y me ajusto el cinturón... Gary era un manojo de nervios en la hora previa al choque porque quería que rodase el balón cuanto antes, tenía ganas de que empezara el duelo de Champions. Incluso le llegó a dar el móvil a su hermano, para que se lo guardara mientras duraba el partido.
Pero la mejor manera de quitarse el nerviosismo fue revivir la 'batallitas' que tuvo en Mestalla y para eso estaba Angulo. Gary Neville se puso a recordar lo que fueron los partidos en el coliseo valencianista, que si la grada pitaba mucho, que si recuerdas lo habilidoso que era este o lo que corría aquel otro. A la conversación de unió también Phil Neville, que recordaba la altura y el golpe que le dio en los riñones un rival. Vamos 'batallitas' en las horas previas que ayudaban a pasar los minutos esperando el partido ante el Lyon.
Durante el partido se pudo ver a un Gary Neville tranquilo, poco protestón (aunque al cuarto árbitro sí que le reclamó varias acciones), hierático, dando instrucciones a Mustafi y a Parejo, pero también con gesto preocupado cuando veía que el Olympique dominaba la pelota e incluso cuando jugaba al contragolpe porque estaban por delante. Ahí es cuando se comenzó a ver las primeras pinceladas de su Valencia CF, aunque las circunstancias del partido hicieron que el equipo se mostrara muy lejos de lo que él quiere.

Transiciones rápidas, contragolpe y más físico

Aunque no renuncia a la posesión, él cree que el ADN del mejor Valencia CF que ha conocido es el contragolpe. Le gustan las transiciones rápidas en ataque. Por eso se lamentó de que el gol de Mustafi lo anulara el árbitro porque de haberse adelantado en el marcador, hubiera podido jugar a la contra. Eso mismo es lo que hizo el Olympique y puso en muchos apuros a los ché. Además, reclamó más garra del equipo, ya que él está acostumbrado a que su Manchester United fuera muy físico y muy directo, pero vio que el Valencia tuvo un grave problema de desgaste el día del Barcelona y no se vio la garra ante el conjunto francés. En ese dibujo que esperaba, los laterales no estuvieron bien, ya que Gayà y, sobre todo, Cancelo, tenían la orden de tener un recorrido de ida y vuelta, pero las ayudas de los compañeros no se produjeron y quedaron en tierra de nadie. Los rivales en la Champions han vivido en la espalda de los laterales del Valencia: sucedió en los dos partidos ante el Zenit, el del KAA Gent y el Lyon en Mestalla.

Red de ojeadores y preparación con un mes de antelación

A nivel táctico hizo uso de dos variantes en el sistema. Comenzó con un 4-3-3 y acabó con dos delanteros y con un 4-4-2 clásico. Con el segundo dibujo y con un mal físico de los jugadores, Parejo y javi Fuego sufrieron mucho, por eso para volver a jugar con dos delanteros, el equipo tiene que ganar en preparación física, recargar las pilas para poder hacer un buen despliegue en los partidos. Pero lo que más llamó la atención fue lo que dijo que rueda de prensa cuando destacó cómo va a ser su funcionamiento respecto a la preparación de partidos. Quiere trabajar los partidos con un mes de antelación, dijo que ya debería estar trabajando el choque del Real Madrid del próximo 3 de enero y también anunció que tiene una red de tres ojeadores que estuvieron analizando al Eibar para saber todos los secretos del equipo de Mendilibar.