Derbi vasco en Lezama marcado por la necesidad

El Sanse visita este domingo Lezama para enfrentarse al Amorebieta en un derbi vasco de recién ascendidos, inédito en el fútbol profesional, marcado por la necesidad de ambos equipos de lograr una victoria que alivie su comprometida situación clasificatoria. El filial de la Real Sociedad ya se ha repuesto de la derrota en Almería y afronta el choque con el objetivo de plasmar en resultados el buen juego que exhiben los jugadores de Xabi Alonso.

El tolosarra tiene que hacer malabares cada fin de semana: el lateral Cristo Romero está a medio camino entre el primer y segundo equipo, al igual que Beñat Turrientes tras sus buenos minutos en Liga Europa el pasado jueves y Julen Lobete parece ya más parte del equipo de Imanol Alguacil que del segundo.

Posible once: Ayesa; Blasco, Arambarri, Urko, Cristo; Roberto López, Pokorny, Alkain; Djouahra, Magunazelaia y Karrikaburu.

En Lezama, el Sanse volverá a tener pegada con la aportación de Jon Karrikaburu y Xeber Alkain, sus goleadores habituales, a quienes hay que unir al joven Jon Magunazelaia, otro de los futbolistas con la etiqueta de perla de Zubieta que fue el autor del único gol realista en los Juegos del Mediterráneo.

En cuanto al Amorebieta, llega a la cita con mejores sensaciones que resultados. Los de Iñigo Vélez está obligado a plasmar cuanto antes esa evolución con una victoria que, de manera inmediata, le permitiría igualar la puntuación del filial txuri urdin y, sobre todo, no perder el paso en la pelea por la permanencia.

Los azules llegan a la cita con el ánimo reforzado tras un trabajado empate en Fuenlabrada en un choque en el que técnico llevó a cabo una revolución en el once, con seis cambios. Así, se espera que vuelva a refrescar al equipo y futbolistas a los que el técnico dio descanso en el Fernando Torres, como el carrilero Gaizka Larazabal, el central Markel Lozano o el centrocampista e Iker Bilbao, podrían regresar a la titularidad para el derbi ante el Sanse.