Fernando Navarro ve "muy bien" al Celta para el derbi

Fernando Navarro, lateral del Deportivo, ha reconocido este miércoles que ve "muy bien" al Celta de Vigo, máximo rival regional del conjunto coruñés y al que se enfrentará la próxima semana en el estadio de Riazor, pero ha advertido de que las trayectorias de los equipos "poco importan" en un encuentro con "tensión y pasión" como el derbi gallego.

"Al Celta le veo muy bien. Tiene una ventaja que es que lleva prácticamente tres años con pocos cambios en plantilla, con una base importante desde el ascenso, es un equipo consolidado con una idea muy clara de juego, con una forma particular de jugar y es el visitante con más puntos por delante de Real Madrid y Barcelona y eso habla de su potencial en el inicio de temporada", dijo.
A pesar de esa trayectoria del Celta, que el pasado fin de semana encajó una goleada en Balaídos ante el Valencia (1-5), Navarro indicó en rueda de prensa que en "un partido peculiar" como el de la próxima semana "siempre se dice que poco importa cómo lleguen los equipos porque es un encuentro con mucha carga de emoción".
Además, recordó que el Deportivo tiene a su favor "la fuerza" de su "afición" y debe hacerlo "valer" en un partido "que, evidentemente, no es como el resto".
"Es un partido con tensión, con pasión y emociones. Tendrá lo que se espera de los partidos con rivalidad y vamos a prepararlo bien para dar un impulso", advirtió Navarro, que afronta el derbi gallego después de haber jugado el sevillano.
"Espero sobre todo mucha emoción, pasión. Es lo bonito de jugar partidos así, que la ciudad te hace sentir lo importante que es, te hace sentir vivo como futbolista y es lo que nos gusta a todos, despertar emociones a los aficionados, que son los que nos alientan y empujan a hacer un buen partido", indicó.
Con el conjunto vigués volverá a Riazor Iago Aspas, al que Fernando Navarro tuvo como compañero la temporada pasada en el Sevilla.
"Es un buen jugador que está haciendo bien las cosas, que defenderá lo suyo igual que yo lo mío. En el partido, cada uno intentará hacer lo mejor para su equipo y después del partido le desearé suerte, pero en el encuentro no hay tiempo ni lugar para amistades ni personales ni grupales y cada uno va a defender lo suyo", apuntó.
El conjunto coruñés llega a la cita con el Celta después de cinco jornadas sin ganar, aunque con solo una derrota (2-0 en Málaga).
"La Liga es el torneo de la regularidad y hay que hacer un cómputo final. No todo va a ser bonito y precioso, no vas a ganar siempre y jugar bien. Igual estamos en una fase con menos fluidez pero es una carrera de fondo con 38 jornadas y el objetivo es hacerlo lo mejor posible para salvarnos cuanto antes", expuso.
El lateral izquierdo blanquiazul aseguró que la plantilla es "exigente" consigo misma y consciente de que puede "dar un pasito más", pero también recordó que la temporada pasada "se sufrió mucho" para lograr la permanencia y pronosticó que la actual "va a ser igual de difícil".
"Somos un equipo de abajo también. Los otros también juegan, tienen urgencias y argumentos. Contra Granada y Levante, que estaban necesitados, no supimos mantener la ventaja. Ojalá hubiéramos ganado esos partidos porque estaríamos con 10 o 12 puntos de ellos", explicó.