1-2. El Nàstic remonta a un débil e impotente Zaragoza y sale del descenso

El Nàstic de Tarragona no tuvo mayores dificultades para remontar un partido ante un Real Zaragoza que solo dio miedo en los primeros minutos y se vio claramente superado en la mayor parte de un encuentro, que deja a los visitantes fuera del descenso y a los locales, peligrosamente cerca del abismo.Comenzó el partido con un Nàstic que fue desde el pitido inicial a controlar el partido y, de hecho, a los dos minutos ya había botado dos saques de esquina, aunque sin mayores consecuencias, pero de repente, le sale una genialidad de pase largo a Manu Lanzarote, tras el que Ángel se recorre casi medio campo sin encontrar resistencia para firmar el 1-0.
Se vino arriba el Zaragoza y, solo tres minutos después, calcó la misma jugada del gol, solo que algo escorada a la derecha y con el balón en el poste de la portería defendida por Reina.
Eran los maños, pese a la posesión del Nàstic, quienes protagonizaban las principales llegadas con peligro, pero nada más les salió en los primeros 45 minutos y el conjunto local se fue diluyendo cual azucarillo.
A la vez, el equipo catalán se fue situando y comenzó a intimidar el área defendida por Saja, siempre con Emaná como protagonista, con un disparo del camerunés en el 21 que se marchó a córner tras un contragolpe del que no se supo zafar bien la zaga zaragocista y otro de Delgado en el 25 que finalmente llegó flojo y desviado.
Pero a la tercera llegó la vencida y, gracias a un contraataque de nuevo mal defendido por los locales, Delgado logró el empate con la inestimable colaboración de Emaná.
Los últimos minutos del primer periodo transcurrieron con los tarraconenses controlando el esférico y los aragoneses perdidos, pero sin novedades más allá de un pase perfecto al delantero centro local que esta vez no controló y de la lesión del visitante Luismi, que tuvo que abandonar el terreno de juego en camilla poco antes del descanso.
Los de Tarragona volvieron de los vestuarios con ganas de marcar el segundo ante un Real Zaragoza desubicado con dos llegadas en las que llegaron a reclamar un posible penalti de Cabrera a Delgado, quien dos minutos más tarde no llegó a controlar otro pase de oro de Emana, ante la impasibilidad de la defensa local.
El conjunto aragonés no reaccionó hasta el 53 con un balón interior de Cani a Lanzarote que se marchó por encima del larguero y, a los dos minutos, con otro pase a Edu García que se fue a córner.
De ahí, el Gimnàstic retomó su claro dominio, aunque con algo menos de frescura, que no impidió, no obstante, que culminara la remontada en el 73 merced a un remate de Suzuki tras un lanzamiento de córner.
En cuanto a los locales, por si no fuera suficiente con el mal partido jugado hoy, los palos también se pusieron en su contra y estrellaron su balón contra ellos hasta dos veces más, la última después de una falta tras un rechace que el último fichaje mediático zaragocista, Samara, no cogió en el día de su puesta de largo.
En los últimos minutos lo intentaron los maños pero con más corazón que cabeza e incapaces de hilar jugadas, mientras la parroquia local se marchaba antes del final del encuentro, que provocó una nueva y habitual pitada en La Romareda contra la directiva y su entrenador, Raúl Agné, que está hoy todavía más cuestionado si cabe.
 
- Ficha técnica:
1 - Real Zaragoza: Saja; Fran, Marcelo Silva, Cabrera, Feltscher; Zapater, Javi Ros; Manu Lanzarote (Samaras, m.74), Cani, Xumetra (Edu García, m.55); Ángel.
2 - Nàstic de Tarragona: Reina; Djetei, Suzuki, Bouzon, Mossa; Mandinda (Barreiro, m.84), Luismi (Xavi Molina, m.44), Tejera, Lobato; Emaná (Álex López, m.75), Juan Delgado.
Goles: 1-0, M.4: Ángel. 1-1, M-29: Juan Delgado. 1-2, M.73: Suzuki.
Árbitro: Jorge Figueroa Vázquez, del Comité Andaluz. No amonestó a ningún jugador local y a los visitantes Bouzon (m.14), Tejera (m.23) y Mandinda (m.78)
Incidencias: partido de la vigésimo séptima jornada de LaLiga 1/2/3, disputado en el estadio de La Romareda ante unos 17.000 espectadores.