Doce años de un Betis grande

Doce años, 144 meses, 626 semanas y 4.384 días han pasado desde el último título del Real Betis Balompié. El tiempo ha hecho su trabajo en silencio y ha sumergido en los recuerdos aquella gloriosa noche madrileña para el beticismo. La temporada 2004/2005 no fue una más en la más que centenaria historia de la entidad verdiblanca. El equipo entrenado por Serra Ferrer se clasificó para jugar la UEFA Champions League y además logró hacerse con su segunda Copa del Rey al derrotar a CA Osasuna por 2-1 en una épica prórroga con final feliz. Cómo han cambiado las cosas desde ese subrayado 11 de junio de 2005.

Toni Doblas; Melli, Juanito, Rivas, Luis Fernández; Arzu, Assunçao, Joaquín, Edu, Fernando y Ricardo Oliveira. Once nombres esculpidos en los anaqueles del Benito Villamarín. A los que hay que sumar los del resto de una plantilla que honró a los béticos. Varela, Lembo y Dani completaron los cambios en la final con participación destacada del canterano. Suyo fue el gol que desató la locura en las gradas del ya hoy despedido Vicente Calderón. Un Betis grande, un Betis canterano.
Madrid se tenía de verdiblanco ilusión para contemplar la última gran noche. El verano llamaba a la puerta y los aficionados heliopolitanos disfrutaban de un equipo que se aseguró la cuarta plaza en una Liga soñada. Faltaba la guinda y se puso. El cántabro Pérez Burrull daba el pistoletazo inicial al duelo en un campo sagrado para los de la Palmera. La final tuvo de todo. No era para menos, no hay final fácil. El Betis compitió y sudó la camiseta y las trece barras para traerse de vuelta el título copero. La emoción se desbordó en el último cuarto de hora del envite.
Ricardo Oliveira abrió la lata pero el australiano Aloisi empató escasos minutos después. El partido iba a la prórroga. Miles de gargantas no cesaron de animar a los suyos. El desenlace estaba escrito y llevaba escrito el nombre de Triana. Dani Alexandre Martín hizo derramar las más dulces lágrimas de los rostros bético. Cantera, coraje, fuerza y lealtad. Arrancada de Varela quien sirve una bola prodigiosa al delantero para que este bata a Elía. 2-1 y Copa a las vitrinas. Doce años de ver a Juan José Cañas levantando el título de la capital bajo la atenta mirada del rey emérito Juan Carlos I. 
Mucho ha cambiado el Betis desde entonces. Tanto deportiva como institucionalmente. El tiempo pasó pero los recuerdos indelebles continuarán reinando en la mente de todos y cada uno de los seguidores que a día de hoy sueñan con ver a su equipo repetir esta gesta.