Rex Ryan tampoco cumplió las promesas con los Bills de Buffalo

El veterano entrenador en jefe Rex Ryan vuelve a encontrarse en otra etapa profesional en la que no pudo cumplir con las expectativas que generó su contratación ni las promesas que hizo al llegar a los Bills de Buffalo.Al menos hasta ahora no lo ha conseguido y al margen de cual sea su futuro, si va a continuar o lo despiden, la realidad es que al concluir la temporada del 2016 no habrá alcanzó el objetivo de clasificarlo a la fase final.
A pesar que el domingo los Bills ganaron por 33-13 a los Browns de Cleveland, equipo que esta temporada no ha conseguido todavía ningún triunfo, fuentes de la liga señalan que Ryan podría estar jugando los últimos partidos al frente de la franquicia de Buffalo como entrenador en jefe.
Ryan está consciente de lo que se aproxima, de acuerdo con el informante, lo que genera una situación extraña en el equipo mientras se hace el movimiento.
"No sé lo que me deparará mi futuro", comentó Ryan al concluir el partido ante los Browns. "Lo que si sé es que vamos a trabajar duro de cara a preparar el partido del próximo sábado, en el Día de Navidad, y estoy muy entusiasmado con el duelo ante los Dolphins de Miami".
Ryan reiteró que estaba en comunicación permanente con los dueños del equipo y que nada de lo que ha transcendido a nivel de los informes periodísticos se da en la relación personal y profesional que hay dentro de la organización.
Mientras Buffalo se prepara para tomar otro camino, la organización dejará como gerente general a Doug Whaley, a quien le darían la oportunidad de elegir a su tercer entrenador en jefe, contando las decisiones que tomó con respecto a Ryan y Doug Marrone.
Los Bills (7-7) han perdido cinco de los últimos ocho partidos que les impidió estar en la fase final por primera vez desde la temporada de 1999 -- la racha más larga en activo en la NFL.
Ryan, de 54 años, que se encuentra en la segunda temporada de un contrato que firmó por cinco, ya tiene experiencia como entrenador en jefe de un par de equipos, recordando que fue despedido por los Jets de Nueva York tras la campaña del 2014 después que tampoco pudo cumplir con la promesa de llevarlos a la disputa del Super Bowl.