Jon Gurutz Vázquez, artífice del milagro del modesto Iurretako
El centrocampista del Deusto Asier Maruri evitó la tercera victoria del sorprendente Iurretako, que ahora es segundo tras el Erandio, pese a que le hayan expoliado la espina dorsal de su plantilla, especialmente desde la Cultural de Durango, con el trasvase de hasta siete jugadores. Un socavón, que ligado a cinco bajas técnicas, elevan los cambios a la docena. Las caras nuevas, como siempre, proceden de la comarca, excepto Cabo, del Elgoibar, donde apenas contaba (estuvo cedido en el Aurrera de Ondarroa), y uno de Erandio, Aristegi. El resto, oriundo de la zona (Berriz, Cultural Juvenil y Iurretako Juvenil), incluido el experimentado central, Gorka Martínez. Hasta cuatro de 18 años se alinearon ante el equipo de Aitor Calle. “Quiero jugadores que tengan hambre, con ambición y llegar hasta donde nos alcance la gasolina”, apunta Jon Gurutz Vázquez, su flamante entrenador.
Este curso, en lugar de primas, el plantel percibe un sueldo muy modesto, en torno a los 100 euros. Un esfuerzo mayúsculo para uno de los clubes con menor presupuesto de la categoría. “Igual es el año que más contento estoy porque veo un vestuario y un ambiente extraordinario”, añade el míster.
El palmarés de Vázquez como técnico del Iurretako es arrollador, abrillantado con tres ascensos en apenas seis años: de Segunda Regional a Primera, donde quedaron terceros, cuatros, terceros y ascenso, con récord de puntos (84) e invictos, con sólo 13 goles en contra. Ya en Preferente, campeones en su primera incursión, y el ejercicio pasado casi logran la machada de promocionar de nuevo. Fueron octavos, aunque a falta de cuatro jornadas dependían de sí mismos para el ascenso a Tercera. Sodupe y Retuerto se llevaron las medallas.
La hierba artificial de Larrakozelai, donde apenas acuden un centenar de aficionados cada quince días, es el otro caballo de batalla que vienen librando. Gestionan suplantarla por una de última generación para un club formado por trece equipos en su estructura, teniendo en cuenta que Iurreta censa 3.500 habitantes. La promesa del Ayuntamiento versa en que el próximo año encara la obra de canalización e implantación de los nuevos tepes. “Intentamos mantener el balón y el campo nos perjudica muchísimo”, protesta Vázquez, que en casa paladea los sistemáticos embotellamientos de los rivales, por lo que, sin esa penalización, rentan fuera con mayor suficiencia.
Curiosamente, y pese a su envidiable currículum, Jon Gurutz Vázquez, con diez temporadas encadenadas en el Iurretako, no ha manejado ninguna oferta de Tercera ni de superior categoría, tan sólo el Erandio le tentó. Los mentideros futbolísticos le colocaban en la Cultural, pero fue su segundo, Imanol de la Sota, quien se llevó el premio. “Me dice mucha gente que no se atreven a llamarme…, aunque tengo muy claro que estaré donde me quieran y donde esté a gusto”, avisa el técnico, que a sus 34 años aspira a ser profesional de la materia. “Tengo ganas de probar más cosas. En la Regional no lo hemos hecho mal”, desliza sujetando el ego. “La dedicación es plena a ello”, avanza sobre su éxito, declarándose “un enfermo” de los banquillos y de la perseverancia: “El trabajo y la constancia, sin creernos más ni menos que nadie, es el secreto”. En el cuerpo técnico se incorporan este curso Iban López, que llega procedente del Elgoibar para ocupar el puesto de segundo, y Tinoko como encargado de los porteros. El milagro se puede producir. La Tercera parece el destino escrito de este Iurretako que pulveriza todos los registros.
@javirbeltran10
