La ilusión de este Real Valladolid
Una derrota siempre deja errores del equipo perdedor. Caer derrotado nunca es injusto al 100%. Así, el Real Valladolid tuvo detalles negativos en su reciente duelo ante la Sociedad Deportiva Huesca. La victoria (1-0) oscense ante el equipo de Luis César Sampedro deja un poso negativo en el mundo blanquivioleta. Tras seis partidos consecutivos sin perder, los pucelanos caían en el Alto Aragón. Una derrota que deja malas sensaciones por el hecho de no sumar pero un duelo que vuelve a ofrecer sensación positivas del equipo blanquivioleta.
Nuevamente el Real Valladolid demostró tener una identidad y un criterio dentro de su estilo. Los de Sampedro saben hasta cómo deben perder. Igual que en la derrota (1-2) ante el Fútbol Club Barcelona B, el equipo blanquivioleta terminaría el partido en el área rival. Fueron fuertes, intensos y convencidos. Con todo ello, el Real Valladolid deja un poso de ilusión, ese pellizco ilusionante que todo entrenador quiere a estas alturas de la temporada. Los equipos siguen en crecimiento y formación pero, ante ello, que el equipo sea capaz de mantener un estilo y una identidad es un resquicio de ilusión que no deja cualquier derrota.