Es Noticia
Casadesús: la clase no se negocia
  • Mi perfil
  • Salir

Casadesús: la clase no se negocia

DMQ
Foto autor
Javier Mínguez

Reportar vídeo

Parece irremediable que, el próximo 1 de julio, los caminos del Levante UD, ya en Primera División, y el protagonista de estas líneas, se separen con un apretón de manos y un "gracias por los servicios prestados". Víctor Casadesús apura sus últimos meses, sus últimas semanas, como futbolista granota pero no es el único que pasa páginas del calendario. Esa cuenta atrás también la debería hacer el aficionado levantinista: caerán las hojas, nacerán otras pero el árbol será diferente. Siempre lo es porque un ascenso, una etapa, nunca es igual a la anterior por mucho que queramos hacer semblanzas. Llegarán jugadores mejores, algunos, esperemos que muchos; y también vestirán de azulgrana otros delanteros peores, de eso estoy seguro aunque el deseo sea el contrario. Pero lo que tienen los futbolistas diferentes es que son irrepetibles. De los que la primera vez que se calzan las botas, pisan el césped y chafan el molde para hacerlo estallar en mil pedazos. Uno de ellos es el balear que, antes de irse, parece decidido a repartir esas píldoras de buen fútbol como las que regaló, al público y a sus compañeros, en el último triunfo frente al Córdoba.

Una vez consumado el descenso, a todos o casi todos los jugadores les entraron las dudas sobre su permanencia en el equipo. Volver a bajar al barro de Segunda, la incertidumbre sobre el proyecto. Lógico, nada fuera de lo futbolístico y de lo humano. A Casadesús, como a los Morales, Toño, Lerma, Rafael Martins, le pidieron que se quedase en el Levante y el mallorquín aceptó su papel, se quedó en la plantilla para devolver al equipo granota al lugar que nunca tuvo que abandonar. Al fin y al cabo, tenía su parte de responsabilidad. Otros optaron por hacer ruido, se salpicaron y se marcharon pero Víctor, como el resto de compañeros que descendieron y ahora forman parte de una plantilla que apunta a leyenda, decidieron apechugar. La clase no se negocia. Ni fuera del campo ni, por supuesto, en un atacante como él, en el verde. Los califas sufrieron el pasado sábado este talento en la reserva. Dos toques al balón bastaron para que el Levante marcase dos goles. Roger y Jason, dos futbolistas con un hambre atroz, hicieron el resto. Claro que sin el golpeo del 'Pistolero' y sin la carrera del gallego, la magia se habría quedado en fuegos de artificio.
Quizá quien mejor supo entenderle a Victor fue David Barral. Un esteta y un genio loco. Un suave Baileys y una chispeante Coca-Cola. Un cóctel difícil de digerir para las defensas rivales que consumó la permanencia
Los futbolistas distintos muchas veces son incomprendidos. Están cortados por otro patrón. Cuando no eres un gran goleador, ni eres el más rápido y ni siquiera tienes la mejor planta, es difícil aparecer en los grandes titulares e incluso tampoco es sencillo hacerse un hueco en ellos cuando se destapa el frasco de las esencias. Que es lo que sucedió hace pocos días en el Ciutat. Quizá quien mejor supo entender al mallorquín en su día fue David Barral aunque fue algo mútuo. Un esteta y un genio loco. Un suave Baileys y una chispeante Coca-Cola. Un cóctel difícil de digerir para las defensas rivales que posibilitó la última permanencia del equipo. El fútbol, que es un reflejo de la vida, no tiene memoria pero algunos queremos recordar su gol al Almería en el primer triunfo tras la llegada de Lucas Alcaraz, el empate imponiendo su corpachón en el Sánchez Pizjuán, el tanto que abrió la lata frente al Valencia o el cabezazo con trayectoria de salvación en el Coliséum frente al Getafe.
Los años no perdonan pero la clase queda para siempre. Y también el oportunismo. Que se lo digan al Tenerife, contra el que firmó la victoria el día que el sancionado Roger lo vio desde la grada. A falta de alguien que desenfundase un revólver, los pupilos de Muñiz se acogieron a la bala en la recámara de Casadesús, que no tiene un Colt 45 como su compañero, lo suyo es la Walther PPK al estilo de James Bond. La elegancia tampoco se entrena, simplemente se tiene aunque calce unas chanclas de ir a la playa en lugar de los oxford negros de Daniel Craig en Skyfall. Pero siempre con silenciador, eso es común tanto para los 007 que se descuelgan por ventanas y conducen ostentosos deportivos como para los que hacen del arte una vaselina, un pase al hueco o un cabezazo imposible. A unos les va hacer ruido y otros andan por la vida con el silenciador a cuestas. Un arma sigilosa como sus goles, como sus tres años y medio en el Levante y seguramente como su despedida.

 

2 comentarios
Escribir comentario 2 comentarios
Deja una respuesta

Información básica de Protección de Datos:
Responsable de los datos: El Desmarque Portal Deportivo, S.L.
Finalidad: con la que se tratan sus datos personales: gestión de comentarios en el blog.
Derechos que le asisten: podrá acceder, rectificar y suprimir los datos, así como revocar la autorización para el tratamiento de los datos, ejercitar los derechos de limitación, portabilidad, y a no ser objeto de decisiones automatizadas dirigiéndose por escrito a la dirección: legal@eldesmarque.com.
Información adicional: puede consultar la información detallada en el siguiente enlace: https://www.eldesmarque.com/politica-de-privacidad (apartado “Gestión de comentarios en foros y blogs”).

Cancelar

  1. Invitado

    Muchas gracias Granota

  2. Granota

    Estoy deacuerdo con el autor , gran clase y un caballero y Sr . Casadesous grande!

Cargando

Has preferido rechazar las cookies, regístrate para acceder al contenido

El registro permite navegar rechazando el aviso de cookies, pero no implica dejar de recibir publicidad ni acceso a contenido o ventajas exclusivas. Si ya estás registrado, haz click aquí para acceder.

Recuerda que tienes la opción de aceptar las cookies para acceder al contenido sin registrarte