El fútbol no fue justo con el sueño del San Ignacio (3-3)

Es sabido que en el fútbol no hay justicia. Se cita su nombe por aferrarse a algo. Pero cuando te toca ver ese reverso amargo de lo que no deja de ser un juego, con cierto componente de azar, duele. Es lo que le ha pasado al San Ignacio este domingo en el que no ha podido remontar el 4-1 de la ida en Sevilla para continuar alimentando el sueño del ascenso a la Liga Iberdrola.

Las bilbaínas, que se han dejado la vida ante un campo a reventar de personas y de ilusión, han merecido al menos ganar este partido de vuelta. Han desperdiciado ocasiones escandalosas para haber hecho real su sueño, pero por una cosa u otra la pelota, con ellas, no quiso entrar, mientras que las andaluzas sacaron petróleo de lo poco que habían generado, como ocurría en el 2-2 tras el rechace de una falta.
Ante lo que, con cara de circunstancias, sólo se puede recurrir al tópico de: "el fútbol es así" y felicitar a la plantilla y cuerpo técnico vizcaíno por su máxima entrega. Hoy han certificado un empate (3-3) en la vuelta de la primera eliminatoria de la fase de acsenso, que culmina y echa el cierre a una gran temporada, tras la que habrá que seguir trabajando para subir a la máxima categoría. Se lo merecen.