José Carlos Galván
(Marca)
La fuente está ahí. En la Avenida de Andalucía. Con muchas menos visitas que el monumento a la Virgen del Rocío de la Plaza del Punto. Y sin ser ya el punto de encuentro de los éxitos del Recreativo. Es el punto de encuentro de los éxitos relativos del Decano, que no es lo mismo.
El equipo de Carlos Ríos era colista el pasado 31 de octubre, tras empatar en casa con el Celta. Una tragedia. Tres meses antes del final de la competición la salvación del Recre ya era una realidad virtual y un mes antes del cierre, matemática. Todo un logro para un conjunto afectado por cambios en el banquillo, en el consejo de administración y en la dirección deportiva y envuelto por una Ley Concursal. Quizás el mérito haya sido más notable que en algún ascenso.
El pasado reciente del Recreativo, localizado en Primera División, la falta de emoción a la hora de lograr la permanencia (todo un lujo) y el despertar del sueño de la promoción han descartado toda euforia. La felicidad, sin embargo, debe ser plena, al menos en la versión reducida de afición que sigue actualmente al equipo.
Para el Decano actual, el balance de campaña es más que positivo. El recreativismo hace un mal uso de la relatividad de los éxitos y este error le perjudica en los siguientes retos. El Nuevo Colombino pitó al equipo en la máxima categoría en las temporadas 2007-08 y 2008-09 porque no hacía ‘el fútbol de Marcelino’, el del ejercicio 2006-07. Qué desajuste histórico. Amén de los desequilibrios de la gestión, la situación actual del club deriva de la falta de valor de los éxitos y la alteración de expectativas.
Si esta permanencia se queda sin reconocimiento, el Recreativo tendrá todas las de perder durante la próxima campaña. No se trata de renunciar a la ambición, imprescindible para la competición. Se trata de disfrutar del cumplimiento de los objetivos antes de pensar en el siguiente. De otra forma, todo lo que no sea luchar por el ascenso la próxima temporada será un fracaso y en las circunstancias vigentes de la entidad ese logro sería una gran sorpresa.
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